Los cientos de camioneros bolivianos que estaban protestando en la frontera entre Chile y Bolivia, en la comuna de Colchane, anunciaron este miércoles que pusieron fin a su paralización.

Las movilizaciones se habían iniciado hace una semana, en un principio debido a que los camioneros estaban molestos por realizarse un PCR de manera obligatoria que debían costearse ellos mismos. Además, acusaban demoras para ingresar a nuestro país, quedando fuera de plazo en algunas entregas.

En ese contexto, la Cancillería boliviana conformó una comisión entre funcionarios de la administración del presidente de Bolivia, Luis Arce, la Aduana Nacional, y los trabajadores de la manifestación, la cual trabajó “específicamente en el Complejo Fronterizo Pisiga-Colchane, para escuchar y dar respuesta a las demandas del sector de transporte internacional, que se instaló en el lugar a partir de dificultades para el tránsito hacia y desde puertos chilenos”.

En un comunicado, el Ministerio de Relaciones Exteriores del país vecino explicó que “a fin de solucionar los problemas que deben enfrentar los transportistas que utilizan este Complejo Fronterizo (…) y en el marco de la Hoja de Ruta convenida con el hermano país de Chile” se llegó a la solución este miércoles.

“Se acordó la ampliación del horario de atención del paso de frontera a partir del 1 de noviembre de 2021, además de medidas concretas para evitar la suspensión temporal del tránsito de vehículos”, indicó la Secretaría de Estado.

Entre las medidas, destaca la realización de atención continua de 9 a 19 horas chilenas, quedando en evaluación una posterior ampliación de este horario. Además, se aprobó la asignación de más personal en función del flujo observado y la apertura de más carriles.

Además, la gobernación de Oruro está evaluando la posibilidad de instalar un servicio de PCR gratuito en las localidades más cercanas al Complejo Fronterizo.