El chileno Nicolás Zepeda, acusado de asesinar a su exnovia japonesa, desaparecida en la ciudad francesa de Besançon en 2016, llegó este viernes a París tras ser extraditado desde Santiago.

Zepeda, de 29 años, llegó a París en el vuelo AF401 de Air France, que aterrizó poco después de las 11:00 locales en el aeropuerto Charles-de-Gaulle, antes de ser entregado a las autoridades francesas, indicó a la AFP una fuente aeroportuaria.

De ahí será trasladado directamente a Besançon, donde será interrogado por la jueza de instrucción a cargo del caso.

Zepeda es el único sospechoso de la desaparición de Narumi Kurosaki, de 21 años, cuyo rastro se perdió el 6 de diciembre de 2016 en una residencia universitaria en Besançon. Aunque su cuerpo no ha sido hallado los investigadores dan por hecho que la joven está probablemente muerta.

Según los investigadores, Zepeda, a quien la justicia francesa acusa de “asesinato doloso cometido con premeditación”, viajó a Francia especialmente para cometer el crimen después de enterarse de que Kurosaki tenía una nueva relación sentimental.

De acuerdo con la investigación, los días previos compró material inflamable, siguió a la víctima y la noche del supuesto crimen la invitó a comer y luego se fue con ella hasta la vivienda estudiantil, donde la habría asfixiado estrangulándola. Posteriormente, habría metido su cuerpo en una maleta y escondido en un bosque cercano.

Para elaborar este relato, la justicia francesa realizó la triangulación del GPS del automóvil que Zepeda alquiló en Francia, revisó imágenes de cámaras de locales comerciales y las compras que realizó con su tarjeta de crédito. El sospechoso niega estar implicado en el presunto crimen.