China permitirá a sus ciudadanos tener un tercer hijo y para ello le ofrecerá ayudas a la población para fomentar la natalidad en un intento por revertir la creciente crisis demográfica en el país.
Cabe destacar que en el año 2020 el país asiático volvió a registrar descensos en su cifra de nacimientos por cuarto año consecutivo.
En este marco, el Politburó del Comité Central del Partido Comunista chino (PCCh), uno de sus máximos órganos rectores, afirmó este lunes que es necesario dar “pasos decisivos” que respondan “al problema del envejecimiento” para mejorar “la estructura poblacional” del gigante asiático.
El censo realizado en el país y que fue presentado el 11 de mayo, reveló que China cuenta ahora con casi 1.412 millones de habitantes, pero igualmente el envejecimiento y la baja natalidad han alarmado en Pekín.
Aparte de permitir un tercer hijo, las autoridades chinas -señalaron en un comunicado de este lunes que- contribuirán a “reducir el gasto de las familias en educación” o a “mejorar las bajas por maternidad”.
“Se requieren esfuerzos para mejorar los servicios de atención prenatal y posnatal, desarrollar un sistema universal de servicios de cuidado infantil o promover la igualdad en la educación”, agrega el texto, sin especificar las medidas que se tomarán.
Asimismo, desde Pekín explorarán otras soluciones al problema del envejecimiento como el retraso de la edad de jubilación y la puesta en marcha de una serie de garantías para los jubilados.
