Paula Mendoza rechazó la propuesta del jefe comunal de licitar el recinto asistencial municipal que aún no ha sido inaugurado, con el argumento de que existe un déficit de más de $5.000 millones heredados de la gestión de Pedro Sabat.

“Resulta inaudito que ahora los municipios pasen a ser entidades inmobiliarias para el sector privado”, espetó este miércoles la concejala socialista por Ñuñoa, Paula Mendoza, al acusar al alcalde de esa comuna Andrés Zahri de querer privatizar la clínica municipal.

La edil indicó que la inversión en la infraestructura del recinto, que aún no ha sido inaugurado, es de $15.000 millones y que el jefe comunal propuso licitarlo para recuperar el déficit de $5.000 millones que dejó el renunciado Pedro Sabat.

“No se puede entregar al lucro lo que debe ser parte de una red pública de salud”, señaló Mendoza al proponer que usar la infraestructura del edificio en cuestión para mejorar actuales dependencias precarias de salud. Por ejemplo, dijo, trasladar el Centro de Salud Familiar (CESFAM) Salvador Bustos “sería un avance para la salud en Ñuñoa”.

Finalmente, la concejala llamó a los vecinos a resistir esta medida y al alcalde Zarhi a demostrar su capacidad para gestionar aportes y compromisos que no enajenen el patrimonio de la comuna ni lucren con el derecho a la salud.

“Él debe abrirse a encontrar una solución en conjunto con el Ministerio de Salud, con el claro objetivo de cómo fortalecer la red pública, y no las utilidades de alguna empresa”, concluyó.