El diputado Andrés Celis (RN) ofició a la Contraloría General de Valparaíso para que investigue las graves acusaciones contra el Hospital Gustavo Fricke de Viña del Mar, las cuales apuntan a que una falla que habría expuesto a más de 100 profesionales del recinto a un caso de tuberculosis.

“He presentado una denuncia ante la Contraloría Regional de Valparaíso por una serie de irregularidad que a mi juicio a cometido el director del Hospital Gustavo Fricke, en cuanto a no haber tomado las medidas correspondientes ante un enfermo por tuberculosis. Es decir, no haber velado porque la presión en la unidad donde esta persona estuvo internada, hubiese cumplido con los requisitos establecidos por nuestro tratamiento jurídico”, indicó Celis.

Además, el parlamentario pidió pesquisar “una serie de falencias que se ha incurrido en la construcción de este hospital para nuestra Región de Valparaíso”.

“Es sumamente grave. El director del Hospital Gustavo Fricke estaba en conocimiento que la construcción de este nuevo hospital no reúne los requisitos -hasta el momento, ya que se hizo un trato directo que ello pueda cumplirse- para que una persona que está contagiada por tuberculosis no pueda exponer al resto de los funcionarios que lo atienden, en este caso a esta persona”, acusó el diputado.

El caso salió a la luz este lunes, cuando el diputado Juan Luis Castro (PS) presentó ante el Juzgado de Garantía de Viña del Mar una querella legal contra el centro asistencial. El perlamentario relató que entre el 29 de mayo y 11 de junio hubo una falla en los sistemas de ventilación en la Unidad de Pacientes Críticos, donde estuvo hospitalizado un paciente con tuberculosis, dejando expuestos a los funcionarios y otros pacientes relacionados a otras patologías respiratorias, como covid-19.

Mediante un comunicado, el recinto hospitalario desmintió las acusaciones e indicó que el paciente está en buenas condiciones de salud, con el diagnóstico de tuberculosis de baja carga. También aseguró que no hay ningún funcionario del hospital contagiado, ya que para ello habrían tenido que estar expuestos a esta enfermedad por 6 horas diarias durante dos semanas.