La Fiscalía General de Bolivia informó que presentó una acusación por “genocidio” y otros delitos contra la expresidenta transitoria Jeanine Áñez, por el deceso de una veintena de manifestantes opositores en el año 2019.
Juan Lanchipa, fiscal general, indicó que presentó “ante el Tribunal Supremo de Justicia un requerimiento acusatorio contra la ciudadana Jeanine Áñez”, quien está en prisión preventiva desde marzo, pero la decisión de si habrá o no un juicio recaerá en el Congreso.
El delito más grave del que se acusa a la exmandataria (“genocidio”) es sancionado con pena de cárcel de 10 a 20 años, según estipula el Código Penal del país vecino.
Precisar que la acusación se origina en la denuncia de familiares de las víctimas de la represión el 15 de noviembre de 2019 en el poblado de Sacaba, y el 19 de noviembre en la planta de gas de Senkata en la ciudad de El Alto.
Según una investigación del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), en ambos hechos murieron 22 personas (11 en cada una), del total de 37 fallecidos que dejó la violencia política en el marco de la renuncia de Evo Morales.
Áñez no se ha pronunciado sobre la acusación, pero el martes publicó en Twitter: “Exigimos respeto a la Constitución, garantías con un debido proceso e igualdad de condiciones”.
