El equipo negociador del Gobierno de Colombia y el Comité Nacional del Paro (CNP) concluyeron la elaboración de un documento de preacuerdos en una reunión que terminó así con avances en el proceso del diálogo hacia la instalación de una mesa de negociación, con el objetivo de poner fin a la actual crisis y las protestas antigubernamentales.

La Oficina del Alto Comisionado para la Paz anunció que tras una semana desde que se iniciasen los encuentros entre las partes, se alcanzó un punto común en la redacción de los preacuerdos que se han trabajado en la primera etapa de acercamientos, informa el medio colombiano ‘El Espectador’.

“Se dio por concluido el análisis de los puntos en los que las partes han redactado textos que deben ser refrendados, tanto por el Gobierno Nacional, como por la Asamblea del Comité del Paro. También dejaron constancias para un análisis posterior sobre los puntos en los que aún no hay consenso”, apuntó la Oficina.

El punto en que se habría avanzado en el texto de preacuerdo sería en garantizar la protesta pacífica, según han indicado al medio local ‘El Tiempo’ fuentes del Comité del Paro, quienes también han señalado que “hay un avance notable” en las conversaciones, si bien aún no se ha oficializado este acuerdo entre las partes.

Llegar a un acuerdo de garantías del derecho a la protesta pacífica era una de las propuestas indispensables de los manifestantes, por lo que haber llegado a una conclusión común al respecto sería un paso importante hacia la instalación de una mesa de negociación.

El Ejecutivo expresó que continuará en la construcción de puntos de encuentro, ya que confía en llegar “pronto” a la creación formal del grupo de negociación.

El equipo de negociación del Gobierno de Iván Duque y los convocantes del Paro Nacional tienen previsto seguir con el diálogo este martes, tras casi una decena de días de largas reuniones que hasta el momento no parecían haber tenido avances.

Por su parte, el ministro de Defensa, Diego Molano, enfrentó el lunes su primer debate de moción de censura en el Senado, donde fue citado por la oposición al considerarlo responsable del “tratamiento de guerra” a la movilización social.

Molano, que volverá este martes a verse ante una moción de censura, pero en la Cámara de Representantes, ha respondido a las acusaciones de la oposición, testimonios de víctimas y de familiares de víctimas de las protestas, insistiendo sobre la función que le da la Constitución a él como ministro y a la Fuerza Pública para proteger a las personas.

“Respetamos la protesta pacífica”, ha manifestado, para añadir que, no obstante, “también somos contundentes contra la violencia y todas las vías de hecho que afectan a todos los colombianos”, una reivindicación en referencia a las consecuencias de los bloqueos, que han sido criticados por el Ejecutivo.

En respuesta a comentarios de la oposición que lo hacían responsable de presuntos homicidios, agresiones o detenciones y abusos sexuales, Molano pidió que se respete el debido proceso y lamentado que se “prejuzgue” a las autoridades “de todo tipo de delitos”.

“Reconocemos el momento que atraviesa el país, afuera hay manifestaciones que expresan inconformidades sociales”, reconoció, para añadir que “ningún juez ha dicho que estamos incumpliendo” la sentencia del Tribunal Constitucional de septiembre de 2020 que ordena al Ejecutivo a actuar frente a la protesta tras denuncias del paro nacional de 2019, donde este tribunal señaló a la estigmatización y al incumplimiento de protocolos de uso de la fuerza.

En su discurso reiteró que “una democracia que claudica ante los violentos se debilita”, en referencia a aquellos que causan disturbios en el marco de las marchas.

Asimismo, defendió la presencia militar y al Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD), sobre el que ha subrayado que es “uno de los mejores grupos antimotines calificados”.