El lunes pasado, Isidora, mujer trans de 26 años sufrió un violento y cobarde ataque de odio en la comuna de La Cisterna, cuando desde el interior de un vehículo, sujetos le dispararon perdigones en su rostro y cuerpo. La joven terminó con un trauma ocular y perdió la visión parcial de uno de sus ojos, mientras el equipo médico del Hospital El Salvador está intentando salvar el otro.

La subsecretaria de Prevención del Delito, Katherine Martorell; la directora de Fundación Iguales, Isabel Amor; la dirigenta de la Organización Amanda Jofré, Alejandra Soto y Lorraine Salvo de Frente Trans Femenino, entregaron detalles del nuevo caso de agresión.

Este no es el único ataque de este tipo que se ha registrado en la comuna durante los últimos días, sin embargo, es el más brutal de ellos. Por esto, Martorell manifestó que “como sociedad no podemos permitirnos este tipo de acciones. Es esa diversidad lo que le da valor a lo que somos como país y como sociedad”, precisó.

Martorell indicó que la elaboración en conjunto con las organizaciones que integran la comunidad LGBTQI+, de una encuesta sobre violencia llegó a más de 3 mil personas “que nos manifestaron una situación muy dolorosa, y es que han sufrido violencia en un 80% de los casos. También tenemos un convenio de apoyo a las personas que son víctimas de este tipo de delito. Estamos enfrentando una situación muy compleja para Isidora, se está trabajando fuertemente desde el hospital para poder salvar su vista. La PDI está trabajando para poder dar con las personas responsables”.

Desde Iguales, Isabel Amor detalló las cifras de la encuesta y declaró que “el 80% de la población de la diversidad sexual y de género ha sufrido algún tipo de violencia física durante los últimos 5 años. La mitad de esa violencia la menos, ocurre en el espacio público. Lo que significa que lamentablemente la otra mitad ocurre en las casas. Es por eso que si no avanzamos con una ley que de manera integral intervenga en esta sociedad y eduque para que tengamos un cambio cultural en que la violencia sea erradicada, no vamos a llegar al Chile que queremos”.

Alejandra Soto, presidenta del sindicato de trabajadoras trans Amanda Jofré, señaló que “estamos muy molestas porque hemos hecho ya varias denuncias en el mismo lugar donde agredieron a Isidora. Estamos muy preocupadas que en ese sector de Vespucio la policía no está haciendo nada para ayuduar a las compañeras que trabajan en el trabajo sexual”.

Sobre el crimen en contra de Isidora, Soto señaló que “hasta el momento se sabe que fueron dos personas las que realizaron el ataque, los disparos le perjudicaron en ambos ojos. El motivo es un crimen de odio hacia las compañeras trans. A ella la iban a matar directamente”.

También alertó que “estamos amenazadas por varios grupos, en este caso hemos sido violentadas desde enero, más o menos en 15 atentados hacia las compañeras trans, sobretodo a las trabajadoras sexuales trans. Nos están matando y nadie hace nada, qué sacamos con tener una Ley de Identidad de Género si no nos sirve un nombre, nos sirve una protección, eso neecesitamos, una Ley Integral Trans Travesti, para que las compañeras salgan del trabajo sexual, que no sea una condición del Estado que tengamos que explotar nuestros cuerpos para ganar plata”.

Por su parte, Lorraine Salvo, candidata a constituyente por el distrito 15 afirmó que “hemos vivido esta situación desde noviembre más menos donde se han denunciado al menos 5 casos graves de agresiones a la comunidad LGBTIQ+ donde son mujeres trans las afectadas. Las compañeras tienen miedo de ir y venir de sus trabajos, no tenemos otra posibilidad como mujeres trans de tener ingresos, no podemos postular a bonos, no tenemos inicio de actividades, ninguna figura del estado. Somos invisibles para el Estado, lo único que nos queda es el trabajo sexual

Por último, Anastasia Benavente, asesora del sindicato Amanda Jofré apuntó a la dramática realidad que vive. “Nuestra expectativa es hasta los 35 años. La compañera Isidora tiene recién 26 años y ya está corriendo este peligro. Por favor les pido a las personas que basta de asesinarnos, basta de misoginia porque no damos para más. No queremos llorar más muertas, no queremos enterrar a más de nuestras compañeras”.