Luego de la nominación del exsindicalista Cristián Cuevas como candidato presidencial de la Lista del Pueblo -por parte de una facción de independiente de la Lista-, otro sector anunció la realización de una consulta ciudadana para determinar su presidenciable.

En ese marco, sectores de la lista, afines a la candidatura de Cuevas, emitieron un duro comunicado, invitando a “refundar” la agrupación y acusando a sus fundadores de mantener privilegios al tomar decisiones, siendo también precandidatos a puestos parlamentarios o bien, parte de equipos afines a otros candidatos.

En ese sentido, el comunicado anuncia que “la esperanza que nació en la elección de constituyentes está hoy amenazada por prácticas antidemocráticas, fascistas y patriarcales”, que pretenderían boicotear la pretensión presidencial de Cuevas, además de explicar que mantienen sus identidades en el anonimato “por temor a las represalias con que hoy se administra la Lista del Pueblo”.

Y agregaron: “Desde hace ya un tiempo se ha instalado una cultura tóxica, que provoca en los adherentes de la ‘Lista del Pueblo’ temor a expresar sus opiniones, cuando estos son opuestos al del fundador. Es una cultura donde se castiga a quienes deciden emprender cualquier tipo de iniciativa que no se condiga con la que el liderazgo de facto levanta, con prácticas que muchas veces rayan en el fascismo”, denunciaron, al tiempo de establecer que la lista se mueve bajo la lógica del “enemigo interno”.

Sobre lo anterior, “el fundador acusa sin fundamentos ni pruebas, con pruebas tramposas o meras especulaciones a quienes le parece que puedan amenazar su liderazgo, todo esto en complicidad de los otros fundadores y facilitado por un pequeño grupo de seguidores”.

“Esta idea del enemigo interno, que quiere ‘quebrar la lista’ es una campaña del terror para mantener a sus adherentes sumisos y silenciar disidencias mediante acoso y bullying, así como también a todos sus cercanos en una ‘cacería de brujas’ que ha llevado a que muchas personas decidan no continuar su participación en la Lista del Pueblo”, denunciaron.

Asimismo, acusaron que el pasado 10 de agosto, la cúpula de la organización decidió la expulsión y suspensión de varios integrantes de la lista, adherentes de la candidatura de Cristian Cuevas, en una nueva asamblea extraordinaria “que no reunía el quórum para sesionar”.

Por ello, acusaron que la gran mayoría de los dirigentes de la Lista del Pueblo son candidatos o precandidatos de la agrupación en pos de las elecciones de noviembre, o bien, son “prestadores de servicios” de otros candidatos, lo que para ellos constituye un “claro conflicto de interés y un factor que distorsiona la toma de decisiones políticas”.

“Lamentamos profundamente que se cambien las reglas antojadizamente, como fue lo ocurrido con la candidatura de Cristian Cuevas, y que además se haya decidido privilegiar una práctica neoliberal como es la competencia entre pares por sobre una democracia deliberativa en la elección de la candidatura presidencial. Esto no representa los valores democráticos de la Lista del Pueblo”, agregaron.

Finalmente, los disidentes realizaron un llamado a tener “la total convicción que la Lista del Pueblo debe ser refundada por el Pueblo, sin amarres ni privilegios a fundadores” y eliminando lo que denominan una “corrupción incipiente”.