El presidente de Siria, Bashar al Assad, ganó las elecciones presidenciales con el 95,1% de los votos, según anunció el presidente de la Asamblea Popular, Hamudeh Sabbagh, informó la agencia de noticias SANA.

Sabbagh detalló que “el candidato Bashar al Assad logró 13.540.860 votos” de los 18.107.109 que se emitieron tanto dentro como fuera del país, lo que supone una participación del 78,64%.

Con este triunfo, que gran parte de la comunidad internacional ya anunció que no reconocería, Al Assad se mantiene como presidente de Siria desde el año 2000. Los resultados en esta ocasión son superiores a los obtenidos en 2014, cuando se impuso con el 88% de los sufragios.

Sin embargo, la Coalición Nacional para las Fuerzas de la Oposición y la Revolución Siria (Cnfors), la principal coalición opositora en el extranjero, expresó su rechazo a la “farsa” de las presidenciales celebradas el lunes.

“El pueblo sirio no reconoce esta despreciable farsa. Las acciones del régimen sólo aumentarán la determinación del pueblo a seguir con la revolución hasta que el criminal Al Assad rinda cuentas por sus crímenes, entre ellos los cometidos en Duma y Ghuta Oriental”, dijo el presidente del organismo Nasr al Hariri.

Así, criticó que Al Assad acudiera a votar en Duma y resaltó que “como cualquier otro criminal, volvió a la escena de sus crímenes”, donde “lanzó barriles bomba y armas químicas”. “Envía un mensaje claro: la criminalidad es mi única naturaleza”, sostuvo a través de una serie mensajes en su cuenta en la red social Twitter.

Al Hariri criticó que el presidente “se hizo con el poder y lo ha mantenido a través del crimen”, antes de agregar que el presidente sirio “envía el mensaje al mundo, que condenó sus horribles crímenes, de que no le importan la justicia internacional o las resoluciones de Naciones Unidas, como a cualquier otro criminal”.

La Cnfors denunció además en un comunicado irregularidades en las elecciones y destacó que “cada vez que el régimen intenta lograr un éxito, lo que refleja es un aumento de su fealdad al exponerse nuevamente”, antes de denunciar “la opresión, tiranía y coacción contra la población”.

De esta forma, cargó además contra el hecho de que Al Assad acudiera a votar a Duma y explicó que “es un intento de causar daño a los miles de víctimas que cayeron en Ghuta Oriental por los disparos, bombas, barriles bomba y armas químicas del régimen, sin que la comunidad internacional moviera un dedo o asumiera su parte de responsabilidad”.

“La tarea del pueblo sirio sigue siendo la revolución hasta que se logre justicia haciendo que el criminal y sus asesores rindan cuentas, así como llevar al país hacia una nueva Siria, una Siria que sea un Estado civil y democrático”, remachó la Cnfors.