Un grupo de exfuncionarios municipales, recientemente despedidos por la Municipalidad de Valparaíso, se manifestó afuera del edificio consistorial para denunciar remociones injustificadas y prácticas antisindicales.

El número de despedidos a pocos días de la elección municipal que reeligió a Sharp, asciende a 44 trabajadores a honorarios, quienes fueron desvinculados bajo el argumento de una falta de presupuesto municipal, hecho que según los trabajadores “se contradice absolutamente con los altos salarios pagados a no-profesionales y las contrataciones realizadas el año 2020 y 2021 y que a la fecha no tienen una clara justificación”.

Dentro de los funcionarios despedidos, también se encuentra Marcela Cortés, excandidata a la alcaldía y por tanto, rival de Jorge Sharp en los pasados comicios.

En una declaración, los trabajadores añadieron que la alcaldía les informó que “quienes continuaran sólo tendrían renovaciones de contrato por tres meses”, a la espera de recursos externos para pagar los salarios, y que de lo contrario, se van a generar más despidos.

En ese marco, la dirigenta del sindicato Sitthoval, Marcela Bahamondes, quien fue una de las despedidas, hizo un llamado de apoyo y calificó como “horroroso” el panorama dentro de la institución edilicia, que incurrió en despidos masivos.

“Estamos viviendo el terror dentro de la municipalidad, una persecución terrible. Muchas familias se están quedando sin el sustento, una de ellas es la mía, ya que yo soy el único ingreso de mi hogar”, manifestó, agregando que “esto no puede ser de una alcaldía ciudadana, que dice ser feminista, cuando estamos viviendo el terror de los acosos laborales y el terror de las prácticas antisindicales”.

La presidenta del mismo organismo, Natalia Corrales, sostuvo que el despido de dirigentes “representa una práctica antisindical inédita en el municipio, que no hace otra cosa que amedrentar a nuestras compañeras y compañeros para que guarden silencio ante las vulneraciones de derechos permanentes ocurridas en el municipio”, y agregó que incluso “se despide además a trabajadores/as que hicieron denuncias por maltrato laboral, cuyos sumarios están en curso”.

Otra de las funcionarias desafectadas, Isadora Naveillán, sostuvo que “la alcaldía ciudadana nos ha golpeado fuertemente dejando a muchas y muchos de nosotros sin nuestras fuentes de trabajo, justificando que son personas con altos sueldos y no esenciales en sus puestos laborales, lo cual es una falta a la verdad”, y agregó respecto a la administración municipal que “esto es una muestra más de una mala toma de decisiones, de atentar contra dirigentas y dirigentes sindicales y trabajadores y trabajadores que no son culpables del mal desempeño de esta administración”.

En tanto, el dirigente Henry Serrano, hizo notar que “en medio de la peor pandemia mundial, el municipio de Valparaíso sentencia a trabajadores y trabajadoras junto a sus familias a la cesantía y la pobreza. Inaugurando este nuevo periodo con una persecución política en contra de los trabajadores a honorarios que no se sometieron a sus prácticas políticas”, en alusión a la disidencia respecto a la figura de Sharp durante los últimos meses.