“No impulsaremos, ni apoyaremos la adopción de ninguna medida que implique el empleo de la fuerza armada o agrave la severa crisis que vive el pueblo venezolano”, sentenció este miércoles en nombre de Chile el canciller Teodoro Ribera.

Ad portas que los representantes de los 12 países adscritos al Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR) se reúnan la segunda quincena de septiembre para analizar y dirimir la posición y acción que adoptarán respecto de Venezuela, el ministro de Relaciones Exteriores dejó en claro que la vía armada para derrocar al régimen de Nicolás Maduro no es una opción para el Gobierno de Sebastián Piñera.

El secretario de Estado subrayó que “no tenemos ningún problema a que se convoque el órgano de consulta del TIAR para discutir en ese seno las medidas adoptadas, pero precisamos que no estábamos dispuestos al empleo de las fuerzas armadas”, aseguró.

El TRIAR se conformó en Río de Jainero, Brasil, en 1947 y su misión es analizar, evaluar y “acordar las medidas (…) para la defensa común y para el mantenimiento de la paz y la seguridad del continente” y por ello es que se reuniráeste mes.

Ello implica que las determinaciones pueden significar la ruptura de las relaciones diplomáticas, la interrupción parcial o total de las relaciones económicas, o de las comunicaciones de todo tipo hasta el empleo de la fuerza armada.

Al respecto, el canciller Ribera indicó que previo a la aprobación del TIAR en la Organización de estados Americanos (OEA), el gobierno chileno se sumó a una iniciativa de Costa Rica y Perú que no contemplaba opciones armadas, que no prosperó tras ser sometida a votación.