El grupo de rescatistas chilenos “Los Topos” detectó movimientos bajo los escombros del barrio Gemmayzeh, en Beirut, una de las zonas más afectadas por la explosión que afectó a la capital de El Líbano el 4 de agosto pasado, y que dejó 190 muertos, más de 6 mil heridos y siete personas desaparecidas, según datos del gobierno de ese país.

Desde Chile, el Ministerio de Relaciones Exteriores ofreció toda su colaboración a la labor que realiza el grupo de voluntarios, que también ha trabajado en el terremoto de 2017 en México o en el rescate de los 33 mineros de Atacama.

Un perro rastreador utilizado por “Los Topos” encontró rastros que podrían corresponder a una persona viva en medio de escombros del un edificio. “Podrían haber sobrevivientes”, se esperanzó el gobernador de la ciudad, Marwan Abboud, en declaraciones a periodistas.

Bomberos de Beirut también creen que los movimientos detectados podrían corresponder a una persona.

Cabe señalar que según las autoridades locales, la explosión que fue causada por toneladas de nitrato de amonio almacenadas desde hacía años en el puerto de Beirut.

APOYO DE CANCILLERÍA

El canciller Andrés Allamand informó la tarde de este jueves que tomó contacto con El Líbano para ponerse a disposición de cualquier necesidad que tengan los rescatistas chilenos.

“Me comuniqué con el embajador de Chile en El Líbano, con sede en Beirut, Mauricio Ugalde, quien desde el lunes está en contacto con el grupo de rescate voluntario ‘Los Topos’, un grupo que merece toda nuestra admiración y respeto”, remarcó.

“La Cancillería va a prestar toda la colaboración que sea del caso para que ellos puedan sacar adelante esta labor humanitaria que tan bien deja al país”, destacó Allamand.