Por más de 4 horas se extendió el miércoles la declaración del perito de la PDI Iván Rubilar en otra jornada del juicio del caso Luchsinger-Mackay, quien entregó detalles del informe pericial de geolocalización que sitúa los teléfonos de cuatro de los acusados en el área correspondiente a la vivienda donde se habría organizado el atentado, el 3 de enero de 2013.
El fiscal vocero Roberto Garrido señaló que esta declaración constituye una prueba científico-técnica que reafirma lo expuesto por el delator compensado y también acusado José Peralino, en cuanto a que hubo una reunión previa en el domicilio de la acusada Francisca Linconao, en la cual planificaron los detalles del ataque a la familia Luchsinger.
Garrido detalló que la pericia del analista de la PDI permitió localizar en la celda de la antena que da cobertura a dicha vivienda los teléfonos de la propia machi y de José Peralino, como también de los aparatos asociados a los acusados José Tralcal Coche -quien debía cumplir un arresto domiciliario a 12 kilómetros- y de Luis Tralcal Quidel. Este último, en su coartada se sitúa la noche del crimen en un motel de Temuco, a más de 20 kilómetros.
“El análisis de geolocalización establece un rango de aproximadamente 4 kilómetros, y en ese rango se encuentra el domicilio de la machi Francisca Linconao y de José Peralino. Pero en ese lugar además se sitúa a acusados que han manifestado que se encontraban en la ciudad de Temuco el día de los hechos, demostrando entonces que sus coartadas no son efectivas”, dijo Garrido.
Añadió que un segundo peritaje del analista Iván Rubilar dio cuenta del abundante tráfico telefónico entre los acusados en los meses previos y posteriores al atentado en el fundo Granja Lumahue.
“Da cuenta que se trata de 11 personas, varios de ellos con muchos contactos telefónicos entre sí y no de personas que no se conocía. La única acusada que ha prestado declaración (Francisca Linconao) ha manifestado no conocer a José Peralino y hemos demostrado que en un periodo de un año tenía más de 80 conversaciones telefónicas con él, y además algunos de los acusados tenían comunicación y contacto con el condenado Celestino Córdova”, precisó el fiscal vocero.
En la jornada de este jueves la fiscalía presentará, entre otros medios probatorios, un peritaje tridimensional que reconstituye el ataque en base al testimonio de José Peralino, y prueba relacionada con la coartada del motel del acusado Luis Tralcal Quidel.
El fiscal vocero Roberto Garrido señaló que esta declaración constituye una prueba científico-técnica que reafirma lo expuesto por el delator compensado y también acusado José Peralino, en cuanto a que hubo una reunión previa en el domicilio de la acusada Francisca Linconao, en la cual planificaron los detalles del ataque a la familia Luchsinger.
Garrido detalló que la pericia del analista de la PDI permitió localizar en la celda de la antena que da cobertura a dicha vivienda los teléfonos de la propia machi y de José Peralino, como también de los aparatos asociados a los acusados José Tralcal Coche -quien debía cumplir un arresto domiciliario a 12 kilómetros- y de Luis Tralcal Quidel. Este último, en su coartada se sitúa la noche del crimen en un motel de Temuco, a más de 20 kilómetros.
“El análisis de geolocalización establece un rango de aproximadamente 4 kilómetros, y en ese rango se encuentra el domicilio de la machi Francisca Linconao y de José Peralino. Pero en ese lugar además se sitúa a acusados que han manifestado que se encontraban en la ciudad de Temuco el día de los hechos, demostrando entonces que sus coartadas no son efectivas”, dijo Garrido.
Añadió que un segundo peritaje del analista Iván Rubilar dio cuenta del abundante tráfico telefónico entre los acusados en los meses previos y posteriores al atentado en el fundo Granja Lumahue.
“Da cuenta que se trata de 11 personas, varios de ellos con muchos contactos telefónicos entre sí y no de personas que no se conocía. La única acusada que ha prestado declaración (Francisca Linconao) ha manifestado no conocer a José Peralino y hemos demostrado que en un periodo de un año tenía más de 80 conversaciones telefónicas con él, y además algunos de los acusados tenían comunicación y contacto con el condenado Celestino Córdova”, precisó el fiscal vocero.
En la jornada de este jueves la fiscalía presentará, entre otros medios probatorios, un peritaje tridimensional que reconstituye el ataque en base al testimonio de José Peralino, y prueba relacionada con la coartada del motel del acusado Luis Tralcal Quidel.