Después de un tiempo sin dar declaraciones, este miércoles Claudio Borghi volvió a hablar sobre un tema que para él fue muy difícil de superar en su momento: La Selección Chilena. El ex estratego de Colo Colo lo hizo analizando los pros y contras que encontrará el combinado criollo con el alejamiento de Jorge Sampaoli y la llegada de Juan Antonio Pizzi.

Sobre qué opinión le amerita la inclusión del técnico español- argentino como el nuevo DT de la Roja, sostuvo que “yo creo que es el técnico ideal. Es una buena persona, buena gente. Tiene experiencia de ser campeón en Chile, en Europa. Hay que darle tiempo para que se adapte al escenario y dejarlo trabajar“.

Respecto a cómo vislumbra el papel de Chile en las eliminatorias, considerando que enredó puntos valiosos ante Colombia como local y perdió con Uruguay, dijo que ahora al país le puede jugar en contra ser considerando un “grande”.

“Comenzó complicado en los resultados pero cuando uno es técnico de selección sabe que ganar un partido no significa nada, y perderlo tampoco. Siempre será candidato. Y después de Copa América pasaste de chico a grande. Eso es bastante complejo”, manifestó.

Consultado sobre si la Roja era uno de los candidatos para ganar la Copa Centenario –que se desarrollará a mitad de este año en Estados Unidos- sostuvo que “Chile ha logrado el objetivo de ser campeón y eso ayuda. Sin embargo, hay obligaciones. Pizzi necesita ir ganando y esa Copa representa un lindo desafió para hacerlo”.

Borgui, también tuvo palabras para el actuar de Sergio Jadue al mando de la ANFP, donde en un acto absoluto de corrupción dejó en bancarrota el ente rector del fútbol chileno.

“Me sorprendió algunas denuncias. Con falta de dinero, entradas revendidas, eso no lo esperaba. Una vez yo le dije a un colega en forma privada, la selección está gastando mucho dinero. El tema de corrupción me sorprendió. Se supone que el desordenado era yo, pero yo puedo entrar y salir de Chile cuando quiero”, aseveró.

Finalmente, el “bichi” habló sobre el nuevo desafió que está asumiendo este semestre en Ecuador, donde llegó a entrenar este año a la Liga de Quito, uno de los elencos más populares de aquél país.

“La altura es compleja para la vida diaria, pero en lo deportivo está bastante bien. Era una propuesta seria, vine una semana a conocer el lugar. Confío en la gente que está a cargo del club. El objetivo es el campeonato nacional y hacer una buena Copa Libertadores“, sentenció.