El grupo yihadista Estado Islámico (EI) reivindicó este martes en un comunicado el atentado que dejó al menos 22 muertos y 59 heridos la noche del lunes en un concierto de Ariana Grande en Mánchester, Inglaterra.
El comunicado, publicado por el EI a través de uno de sus canales habituales en las redes sociales, precisa que “uno de los soldados del califato colocó una bomba entre la muchedumbre” durante el concierto. El grupo yihadista amenaza también con otros ataques.
El ataque es una “venganza de la religión de Dios” y tiene por objetivo, en referencia a los cristianos, ser una “respuesta a sus agresiones contra las casas de los musulmanes”.
“Lo que viene va a ser más fuerte, más intenso”, amenazó.
Amaq, la agencia de propaganda del grupo ultrarradical, afirmó a su vez que detrás del ataque hay un “equipo” de combatientes.
La potente explosión se registró en una de las entradas del Manchester Arena, un pabellón con capacidad para 21.000 personas, al final de un concierto de Ariana Grande, de 23 años e ídolo de los preadolescentes.
Según la policía, el autor del ataque murió haciendo detonar un artefacto explosivo. Las autoridades detuvieron a un hombre de 23 años en conexión con este atentado, el más mortífero que se registra en Reino Unido desde 2005.
Como recordó la primera ministra británica, Theresa May, todos los atentados “son ataques cobardes contra gente inocente pero este destaca por su cobardía horrenda y repugnante, al tener como blanco deliberado a jóvenes y niños inocentes, indefensos” que acababan de ver a la cantante pop estadounidense Ariana Grande en el Manchester Arena.
May dijo que la Policía cree conocer la identidad del terrorista, pero no la hará pública porque aún investiga si actuó solo.
Pidió además a los británicos no guardar en su memoria el recuerdo de la “carnicería sin sentido” ocurrida en Mánchester, sino de todas las personas que corrieron a ayudar, “que encarnan el espíritu de Mánchester y el espíritu del Reino Unido”.
“Los terroristas nunca van a ganar y nuestros valores, nuestro país y nuestra forma de vida siempre prevalecerán”, aseguró.
La reina Isabel II expresó su “admiración” por la manera en que los habitantes de Mánchester “han respondido, con humildad y compasión, ante este acto de barbarie”.
Ariana Grande canceló también su concierto del jueves en Londres y suspendió su gira por otros cuatro países europeos, dijeron fuentes cercanas a la artista al medio especializado TMZ.
El comunicado, publicado por el EI a través de uno de sus canales habituales en las redes sociales, precisa que “uno de los soldados del califato colocó una bomba entre la muchedumbre” durante el concierto. El grupo yihadista amenaza también con otros ataques.
El ataque es una “venganza de la religión de Dios” y tiene por objetivo, en referencia a los cristianos, ser una “respuesta a sus agresiones contra las casas de los musulmanes”.
“Lo que viene va a ser más fuerte, más intenso”, amenazó.
Amaq, la agencia de propaganda del grupo ultrarradical, afirmó a su vez que detrás del ataque hay un “equipo” de combatientes.
La potente explosión se registró en una de las entradas del Manchester Arena, un pabellón con capacidad para 21.000 personas, al final de un concierto de Ariana Grande, de 23 años e ídolo de los preadolescentes.
Según la policía, el autor del ataque murió haciendo detonar un artefacto explosivo. Las autoridades detuvieron a un hombre de 23 años en conexión con este atentado, el más mortífero que se registra en Reino Unido desde 2005.

PRIMERAS VÍCTIMAS IDENTIFICADAS
Una niña de 8 años y una joven de 18, ambas británicas, son las primeras víctimas mortales identificadas de los 22 fallecidos en el atentado.Como recordó la primera ministra británica, Theresa May, todos los atentados “son ataques cobardes contra gente inocente pero este destaca por su cobardía horrenda y repugnante, al tener como blanco deliberado a jóvenes y niños inocentes, indefensos” que acababan de ver a la cantante pop estadounidense Ariana Grande en el Manchester Arena.
May dijo que la Policía cree conocer la identidad del terrorista, pero no la hará pública porque aún investiga si actuó solo.
Pidió además a los británicos no guardar en su memoria el recuerdo de la “carnicería sin sentido” ocurrida en Mánchester, sino de todas las personas que corrieron a ayudar, “que encarnan el espíritu de Mánchester y el espíritu del Reino Unido”.
“Los terroristas nunca van a ganar y nuestros valores, nuestro país y nuestra forma de vida siempre prevalecerán”, aseguró.
La reina Isabel II expresó su “admiración” por la manera en que los habitantes de Mánchester “han respondido, con humildad y compasión, ante este acto de barbarie”.
Ariana Grande canceló también su concierto del jueves en Londres y suspendió su gira por otros cuatro países europeos, dijeron fuentes cercanas a la artista al medio especializado TMZ.