Oficialmente, el terreno pertenece al municipio de Santiago, por lo que su alcalde, Felipe Alessandri, inició un proceso de revocación de los permisos entregados a la inmobiliaria Carlos Valdovinos -autorizaciones otorgadas en la administración de Carolina Tohá- quienes pretendían construir un megaproyecto de tres edificios de 15 pisos, lo que se traduciría en más de 4.200 departamentos de 32 a 35 metros cuadrados.
“Este permiso se entregó durante la administración anterior y yo no entiendo cómo (…) Vamos a hacer un sumario y a sentarnos en la mesa con la inmobiliaria para trabajar, ojalá, en una expropiación para que podamos tener áreas verdes o sino trabajar en un nuevo proyecto que las contemple, que tenga un impacto mucho menor al proyecto aprobado por la Municipalidad de Santiago en 2016”, afirmó Alessandri.
Aunque el sitio tenga denominación de “parque”, oficialmente no es un área verde cuidada, aunque en la década del 60 hubo intentos para que fuera considerado tal. Con el pasar de los años el sitio fue traspasado a Cema Chile y de esta organización a un grupo inmobiliario privado.
La actual empresa que posee del terreno está ligada a los dueños de la inmobiliaria “Su Ksa” constructora duramente cuestionada por la opinión pública por las inmensas torres que levantó en la comuna de Estación Central bautizadas como “Guetos Verticales”.
En una declaración pública, la constructora Carlos Valdovinos señaló que la “Inmobiliaria Carlos Valdovinos reitera que el proyecto en comento, cuenta con la totalidad de sus permisos correspondientes a su actual fase de desarrollo y que sus acciones y avances se encuentran en línea con la información de la que disponemos a la fecha”.
Por último, añadieron que “nuestra empresa ha tomado contacto con el municipio para mejor comprensión de lo expuesto y para evaluar posibles cursos de acción”.
El plano regulador de la comuna de Santiago permite, como máximo, 1.140 personas por hectárea. Sin embargo, el proyecto contemplaría una densidad de 5.900 habitantes.
“Recibir del orden de 5.900 vecinos en departamentos de 32 a 35 metros cuadrados, donde cada familia tiene tres o cuatro personas, atenta gravemente contra su dignidad. Por eso, valiéndonos de los medios que nos permite la ley, vamos a frenar este proyecto”, agregó el alcalde.