La cumbre de procuradores -a la que por Chile asistió el fiscal nacional Jorge Abbott- se realizó bajo un total hermetismo, y una vez concluida también se informó el acuerdo de crear “equipos conjuntos de investigación, bilaterales o multilaterales”.

Mediante un comunicado hecho público luego de su reunión, los fiscales nacionales de 11 países en los que operó la firma brasileña Odebrecht, acordaron en Brasilia establecer “la más amplia, rápida y eficaz cooperación” sobre los asuntos de corrupción en que se vio implicada dicha empresa.

La cumbre de procuradores -a la que por Chile asistió el fiscal nacional Jorge Abbott– se realizó bajo un total hermetismo, y una vez concluida también se informó el acuerdo de crear “equipos conjuntos de investigación, bilaterales o multilaterales”, con el fin de coordinar las investigaciones en Brasil y los otros países en que Odebrecht incurrió en sobornos y otros actos ilegales.

El encuentro fue organizado por la Procuraduría General de Brasil y asistieron fiscales de Argentina, Chile, Colombia, Ecuador, México, Panamá, Portugal, Perú, República Dominicana y Venezuela, que es donde se investiga las acciones corruptas de la constructora. También fueron invitados, pero no asistieron, los representantes de las Fiscalías de El Salvador, Guatemala, Antigua y Barbuda y Mozambique.

Según el comunicado, esos equipos “actuarán con plena autonomía técnica y en desarrollo de su independencia funcional”, teniendo en cuenta “la importancia de la recuperación de los activos y la reparación integral de los daños causados por esos ilícitos, incluyendo el pago de multas, según la legislación de cada país”.

La dimensión internacional del escándalo se dio a conocer a fines de 2016, cuando el Departamento de Justicia de EEUU reveló que la constructora admitió haber pagado casi US$ 800 millones en sobornos en 12 países de África y Latinoamérica, incluido Brasil.