Subsecretario del Interior se refirió al grave hecho que acentúa el cuestionamiento al proceder de la institución en materia de incidentes y orden público, y que motivó la inmediata baja de los funcionarios que ya son indagados por la fiscalía sur.
“En este caso es notoria la correcta actuación de Carabineros y de su general director en cuanto a tomar medidas oportunas y drásticas”, destacó este lunes el subsecretario de Interior, Juan Francisco Galli, al referirse a la decisión del general Mario Rozas de dar de baja a los siete funcionarios que agredieron a un joven de 18 años en Puente Alto. A juicio de la autoridad de Gobierno, la brutal golpiza que dieron dos oficiales y cinco efectivos de la policía uniformada al muchacho el pasado miércoles 29 de enero es “una conducta que claramente se sale de los protocolos de uso de la fuerza de la institución”. Por lo tanto, indicó que lo cabe en este caso es resaltar el proceder de la policía uniformada em cuanto que “lo primero que se hizo preventivamente fue sacarlos de las funciones operativas y en segundo lugar, por decisión del general director, se les dio de baja”. Galli sostuvo que frente a esta situación “hay que distinguir entre el uso legítimo y correcto de la fuerza para resguardar los derechos de las personas de aquello que no corresponde y se sale de los protocolos”. El caso se conoció con la viralización de un video, en el que puede verse a un grupo de carabineros pateando y golpeando con bastones a una persona que cayó al costado de un portón y luego se dieron a la fuga en dos vehículos.