Ministro Rodrigo Valdés indicó el escenario económico internacional marcado por el precio del cobre genera una merma de un punto del PIB en las arcas fiscales y que por ello es necesario reducir gastos a nivel de Gobierno en acciones administrativas y de gestión como viajes. Recalcó que el área de Salud no se verá afectada.
“Este es un ajuste moderado que nos permite proteger el gasto que a la gente le importa”, aseguró este lunes el titular de Hacienda, Rodrigo Valdés, al oficializar el recorte presupuestario de US$ 540 millones ($380 mil millones) que deberá hacer el Ejecutivo en diversas áreas para paliar el déficit del Producto Interno Bruto (PIB) que ha producido el bajo precio del cobre y el vaivén de la economía.
El secretario de Estado subrayó que esta “calibración” del Presupuesto no toca los beneficios para la ciudadanía, al contrario los prioriza, por lo que éste se centrará en medidas de austeridad en los servicios (reducciones de horas extras, honorarios, funciones críticas, compras de vehículos, adquisiciones de bienes y servicios como estudios, pasajes, fletes, publicidad y gastos de representación), en algunos programas específicos y el alguna proporción en gasto de capital.
Precisó que en esta modalidad de reducción de gastos corrientes entrarán todos los ministerios menos la cartera de Salud y tampoco se considera a los poderes Legislativo y Judicial.
“Si algo demuestra este ajuste es que el Gobierno no es ciego, no es insensible al cambio de condiciones si lo que quiere es resguardar la política fiscal como se ha diseñado, lo que significa que dado que hay un entorno distinto ésta tiene que reaccionar a eso. Es simplemente usar nuestro marco conceptual que diseña la política y lo que estamos haciendo es usarlo porque ha sido muy útil para Chile”, enfatizó el ministro.
SECCIÓN: Economía
AUTOR: Samuel Romo
FUENTE: Giselle Sauré Guichou