Hace pocos días, se conoció una solicitud de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Diputados al canciller Heraldo Muñoz, para que se implemente una visa consular para ciudadanos haitianos que buscan emigrar a Chile.
Esto por el aumento significativo que ha habido de ciudadanos del país caribeño en los últimos años que estaría generando una vulneración a sus derechos humanos. Según cifras de la PDI, mientras en 2013 ingresaron cerca de 2.000 haitianos a Chile, durante el primer semestre de 2016 habrían ingresado más de 20.000.
El oficio para la visa fue firmado por el canciller Heraldo Muñoz y remitido por él mismo al Ministerio de Interior para ser evaluado, pero ya ha causado indignación en organizaciones migrantes y en parte de la población haitiana que vive en el país.
“A aquellos que sufren cuando el compatriota sufre, a aquellos que sufren cuando un compatriota muere de frío, les advierto que vamos a sufrir más. Recibimos la noticia de que los ciudadanos haitianos van a necesitar visa consular para entrar a Chile”, decía el lunes pasado el haitiano Yvenet Dorsainvil durante el lanzamiento del primer diccionario kreyòl-español del que él mismo es el autor.
“Parece que no hemos aprendido mucho de lo que pasa con la comunidad dominicana. Nunca la visa fue ni va a ser una barrera para la movilidad humana. Es más, provoca más problemas. Más personas van a morir en el desierto de Chile. Los países vecinos no exigen visa y eso facilita que los compatriotas lleguen a los países fronterizos y paguen a un coyote para cruzar la frontera”, agregó.
Tal como señaló Dorsainvil, en 2012 durante el gobierno de Sebastián Piñera, se implementó una visa consular para ciudadanos de República Dominicana. El año anterior a la entrada en vigencia de la visa, entraron a Chile menos de 5.000 dominicanos. Se estima que en 2015 había cerca de 20.000 dominicanos viviendo irregularmente en Chile.
Lejos de disminuir la población de migrantes de República Dominicana, la visa generó entradas por sectores fronterizos ilegales, y un mayor tráfico y trata de personas.
Por ese antecedente, Wadner Maigan, embajador de la juventud de Haití en Chile, pide que en caso de que la visa se implemente se haga bien. “Se puede hacer, pero de manera formal con las embajadas, en un acuerdo binacional. Pero mi duda es que pedir una visa consular no va a cambiar que los haitianos entren a Chile. Actualmente los dominicanos están en una situación muy difícil porque llegaron de manera irregular”, explicó a La Nación.
Por su parte, Eduardo Thayer, miembro del Consejo Nacional de Migraciones, cree que la medida es prejuiciosa y le falta rigurosidad, por lo que la interpreta como una maniobra política. “La cancillería actúa como en un mundo propio que entiende que porque los inmigrantes haitianos viven mal y son muchos, sin saber mucho como viven ni cuántos son, dice que hay que poner la visa consular. Yo lo que veo en eso es una decisión política de utilizar la migración en el contexto electoral. Que hay una estrategia para que la derecha no le entre a la Nueva Mayoría”, señaló a La Nación.
Thayer explica además que la idea no se ha hecho cargo de las consecuencias que ha tenido la visa consular dominicana en el sentido de tráfico y trata e incremento de la irregularidad del país. “Entonces ante la falta de argumentos uno no puede sino sospechar que hay una utilización política justo con los haitianos que son muy visibles y salen mucho en la prensa”.
Sin embargo, Miguel Yaksic, director nacional del Servicio Jesuita a Migrantes (SJM) llamó a la calma a través de su Twitter, donde señaló que “Chile no ha impuesto visa a haitianos. Mala idea que circula entre algunas autoridades. Necesitamos una política migratoria en serio”. Mientras, Dorsainvil señaló durante el lanzamiento de su diccionario que “somos un pueblo milagroso” y que seguirán enfrentando las adversidades con la misma fuerza con que derrotaron a Napoleón Bonaparte en 1803.
