Junto con rechazar ese tipo de acciones -que se da en el marco de los 30 años del retorno a la democracia y el segundo año de la segunda administración del Presidente Sebastián Piñera-, que esta jornada comenzó con incidentes en el Instituto Nacional, el secretario de Estado indicó que en 2019 se perdieron muchas horas de clases.
“El año pasado el sistema escolar perdió en promedio un mes y medio de clases”, dijo la autoridad a 24 Horas, añadiendo que si se desglosan esas cifras, “la educación pública perdió casi dos meses y los liceos emblemáticos, más de dos meses”, alcanzando un promedio de 240 horas perdidas.
Es en este sentido, el titular de Educación señaló que “todo hecho de violencia que impida a millones de chilenos ejercer el derecho a educarse debe ser condenado”, al tiempo que, enfatizó, debe existir un “compromiso” por parte de toda la comunidad educativa para volver a clases, entre ellos el Colegio de profesores, ya que “no se puede mejorar la educación si no estamos en la sala de clases, si no hay un proceso formativo continuo”.
Raúl Figueroa expuso también que existen dos opciones a tomar para hacer la educación pública una “alternativa real”, que son volver a clases, o bien, “nos olvidamos de eso y consideramos que la interrupción de clases es un camino, lo que significa optar por, derechamente, la destrucción de la educación pública”.