El ministro del Trabajo, Nicolás Monckeberg, hizo un llamado urgente a los parlamentarios de los distintos sectores políticos para que aprueben con celeridad la Reforma al Sistema de Pensiones, ingresada al Congreso el pasado 5 de noviembre.
Durante su vista al Hogar Nuestra Señora de Guadalupe, de la Fundación Las Rosas, que acoge a 110 adultos mayores, la mayoría en estado de dependencia severa, el secretario de Estado señaló que “no tenemos derecho a transformar este debate en un debate ideológico estéril e interminable”.
“El objetivo de esta reforma es mejorar las pensiones aquí y ahora, y para adelante a todos nuestros adultos mayores. Hay muchos chilenos que están esperando día a día que esta reforma deje de ser un proyecto y comience a ser una realidad”, sostuvo Monckeberg.
“Los cambios a nuestro sistema de pensiones debimos haberlos hechos antes, sin duda llegamos tarde. Nuestro deber hoy es ponernos al día, porque nuestros adultos mayores no pueden esperar eternamente. Nuestro país está envejeciendo a la velocidad del rayo. Por eso es importante esta reforma y aprobarla cuanto antes”, agregó el titular del Trabajo.
El ministro indicó que “no podemos transformar esta discusión en un gallito político de gobierno y oposición, aquellos que pretendan sacar ventajas políticas a costa de las pensiones de los adultos mayores, definitivamente están equivocando el camino y yo estoy seguro que la gran mayoría de los parlamentarios no quiere eso”.
Desde el ministerio detallaron que el Proyecto de Reforma al Sistema de Pensiones presentado por el Gobierno contempla la inyección de US$ 1.000 millones al Pilar Solidario, lo que se convierte en el mayor aporte desde la creación de este pilar en 2008. Lo anterior, con el objetivo de mejorar desde el primer día las pensiones de los casi 1,5 millones de beneficiarios del Pilar Solidario -que corresponden al 60% más vulnerable de nuestro país- y que hoy reciben una Pensión Básica Solidaria (PBS) de $107 mil o un Aporte Previsional Solidario (APS).
El aumento de ambos pilares solidarios será financiado por el fisco, a través de recaudación tributaria. “Nada puede ser más solidario que un sistema en que todos a través de los impuestos pagan y contribuyen para que los adultos mayores con pensiones más baja y que están un estado mayor de vulnerabilidad tenga una mejor calidad de vida. Cuando esta solidaridad se hace a través de impuestos son definitivamente los que tienen más y los que tienen menos los que reciben más. Esa solidaridad respeta además la propiedad que tienen los trabajadores de sus cotizaciones”, enfatizó el ministro.
La reforma crea un seguro para personas de más de 65 años que sean dependientes severos, cuyo piso será de $80 mil y será financiado con un aumento de 0,2% de las cotizaciones previsionales de los trabajadores, con cargo al empleador. Quienes no cumplan con los requisitos para acceder a este seguro y estén dentro del 60% más vulnerable de la población, recibirán del Estado dicho aporte a través de un subsidio.
Durante su vista al Hogar Nuestra Señora de Guadalupe, de la Fundación Las Rosas, que acoge a 110 adultos mayores, la mayoría en estado de dependencia severa, el secretario de Estado señaló que “no tenemos derecho a transformar este debate en un debate ideológico estéril e interminable”.
“El objetivo de esta reforma es mejorar las pensiones aquí y ahora, y para adelante a todos nuestros adultos mayores. Hay muchos chilenos que están esperando día a día que esta reforma deje de ser un proyecto y comience a ser una realidad”, sostuvo Monckeberg.
“Los cambios a nuestro sistema de pensiones debimos haberlos hechos antes, sin duda llegamos tarde. Nuestro deber hoy es ponernos al día, porque nuestros adultos mayores no pueden esperar eternamente. Nuestro país está envejeciendo a la velocidad del rayo. Por eso es importante esta reforma y aprobarla cuanto antes”, agregó el titular del Trabajo.
El ministro indicó que “no podemos transformar esta discusión en un gallito político de gobierno y oposición, aquellos que pretendan sacar ventajas políticas a costa de las pensiones de los adultos mayores, definitivamente están equivocando el camino y yo estoy seguro que la gran mayoría de los parlamentarios no quiere eso”.
Desde el ministerio detallaron que el Proyecto de Reforma al Sistema de Pensiones presentado por el Gobierno contempla la inyección de US$ 1.000 millones al Pilar Solidario, lo que se convierte en el mayor aporte desde la creación de este pilar en 2008. Lo anterior, con el objetivo de mejorar desde el primer día las pensiones de los casi 1,5 millones de beneficiarios del Pilar Solidario -que corresponden al 60% más vulnerable de nuestro país- y que hoy reciben una Pensión Básica Solidaria (PBS) de $107 mil o un Aporte Previsional Solidario (APS).
El aumento de ambos pilares solidarios será financiado por el fisco, a través de recaudación tributaria. “Nada puede ser más solidario que un sistema en que todos a través de los impuestos pagan y contribuyen para que los adultos mayores con pensiones más baja y que están un estado mayor de vulnerabilidad tenga una mejor calidad de vida. Cuando esta solidaridad se hace a través de impuestos son definitivamente los que tienen más y los que tienen menos los que reciben más. Esa solidaridad respeta además la propiedad que tienen los trabajadores de sus cotizaciones”, enfatizó el ministro.
La reforma crea un seguro para personas de más de 65 años que sean dependientes severos, cuyo piso será de $80 mil y será financiado con un aumento de 0,2% de las cotizaciones previsionales de los trabajadores, con cargo al empleador. Quienes no cumplan con los requisitos para acceder a este seguro y estén dentro del 60% más vulnerable de la población, recibirán del Estado dicho aporte a través de un subsidio.