La superintendenta de Casinos, Vivien Villagrán, anunció que el casino Monticello sólo podrá abrir al público cuando tenga detector de metales.
Esto, luego del incidente del domingo, en que el veterinario Luis Campos Azócar extrajo un arma en la sala de juegos y abriera fuego matando a dos trabajadores del lugar. Posteriormente se suicidó inyectándose veneno tras estar parapetado más de cinco horas.
“Las medidas hasta ahora han resultado insuficientes”, dijo Villagrán, quien sostuvo que el casino se comprometió a instalar los pórticos en el mediano plazo, agregando que “ese fue el compromiso y resguardaremos que ocurra”, recalcó.
Por su parte el gerente del casino, Manuel Rojas, afirmó que cuentan con protocolos para manejar a clientes complejos y destacó que durante ocho años han funcionado sin problemas.
Campos Azócar mató a balazos a un croupier y a otra empleada del casino e hirió a otros cuatro trabajadores, tres de ellos graves. Al momento de la balacera, en el salón de mesas de juego, había unas 70 personas entre clientes y empleados que corrieron a esconderse a los baños y otras dependencias.
A medida que se van aclarando los hechos, logró determinarse que Campos Azócar estaba alojado en el hotel del casino. Durante la mañana el médico veterinario habría perdido entre 15 y 17 millones de pesos. Se sospecha que estuvo consumiendo alcohol.
Las víctimas fatales fueron identificadas como Óscar Elías Reyes, el croupier que murió en el mismo lugar de un balazo en el cráneo, y Carolina de Los Ángeles Carreño, la empleada del casino que falleció en el Hospital de Granero.
Esto, luego del incidente del domingo, en que el veterinario Luis Campos Azócar extrajo un arma en la sala de juegos y abriera fuego matando a dos trabajadores del lugar. Posteriormente se suicidó inyectándose veneno tras estar parapetado más de cinco horas.
“Las medidas hasta ahora han resultado insuficientes”, dijo Villagrán, quien sostuvo que el casino se comprometió a instalar los pórticos en el mediano plazo, agregando que “ese fue el compromiso y resguardaremos que ocurra”, recalcó.
Por su parte el gerente del casino, Manuel Rojas, afirmó que cuentan con protocolos para manejar a clientes complejos y destacó que durante ocho años han funcionado sin problemas.
Campos Azócar mató a balazos a un croupier y a otra empleada del casino e hirió a otros cuatro trabajadores, tres de ellos graves. Al momento de la balacera, en el salón de mesas de juego, había unas 70 personas entre clientes y empleados que corrieron a esconderse a los baños y otras dependencias.
A medida que se van aclarando los hechos, logró determinarse que Campos Azócar estaba alojado en el hotel del casino. Durante la mañana el médico veterinario habría perdido entre 15 y 17 millones de pesos. Se sospecha que estuvo consumiendo alcohol.
Las víctimas fatales fueron identificadas como Óscar Elías Reyes, el croupier que murió en el mismo lugar de un balazo en el cráneo, y Carolina de Los Ángeles Carreño, la empleada del casino que falleció en el Hospital de Granero.