Los menores que ingresan a prekínder, kínder y primero básico tienen una mayor prevalencia del sobrepeso y obesidad, de acuerdo al último estudio de Mapa Nutricional 2018 dado a conocer por la Junta Nacional de Auxilio Escolar y Becas (Junaeb).
De acuerdo a los datos, la prevalencia del sobrepeso y obesidad en prekínder, kínder y primero básico aumentó en 1,3 puntos porcentuales, en promedio, en comparación con el año anterior, donde destaca el incremento en la obesidad en estudiantes de kínder, con un crecimiento de 2,5 puntos porcentuales.
Otro punto negativo de este Mapa Nutricional, es que hay un porcentaje mayor de obesidad en quinto básico, curso que se agregó a la encuesta para tratar de disminuir la brecha temporal en que no se disponía de información del estudiante (entre primero básico y primero medio).
“En quinto es donde existe mayor prevalencia de obesidad, con un 27,7% de estudiantes que presentan esta condición. Aunque es un dato alarmante, debemos ser prudentes y esperar al menos tres años de medición para establecer una tendencia real. De todas formas, esta información será el punto de partida para idear intervenciones específicas en este ciclo”, afirmó el director nacional de Junaeb, Jaime Tohá.
Sin embargo, el panorama nutricional del país en estudiantes, tiene a mejorar desde primero medio, donde se visualizó una baja de la obesidad.
Aquí, hubo una disminución de e 1,25 puntos porcentuales (pp) en los índices de obesidad y 0,15 pp de disminución en obesidad severa, en comparación con la medición de 2017.
“Es una excelente noticia, en comparación a la información previa que indicaba que la prevalencia de obesidad en este nivel escolar se había duplicado durante los 7 años anteriores (entre 2011 y 2017)”, se indicó desde la Junaeb.
En relación a las zonas del país, las comunas con alta vulnerabilidad están en la Región Metropolitana y las regiones del sur del país, las que presentan una mayor prevalencia de obesidad infantil.
Este estudio analizó cinco niveles educacionales en todo el país (prekínder, kínder, 1° básico, quinto básico y 1° medio) del sistema que recibe financiamiento público.
De acuerdo a los datos, la prevalencia del sobrepeso y obesidad en prekínder, kínder y primero básico aumentó en 1,3 puntos porcentuales, en promedio, en comparación con el año anterior, donde destaca el incremento en la obesidad en estudiantes de kínder, con un crecimiento de 2,5 puntos porcentuales.
Otro punto negativo de este Mapa Nutricional, es que hay un porcentaje mayor de obesidad en quinto básico, curso que se agregó a la encuesta para tratar de disminuir la brecha temporal en que no se disponía de información del estudiante (entre primero básico y primero medio).
“En quinto es donde existe mayor prevalencia de obesidad, con un 27,7% de estudiantes que presentan esta condición. Aunque es un dato alarmante, debemos ser prudentes y esperar al menos tres años de medición para establecer una tendencia real. De todas formas, esta información será el punto de partida para idear intervenciones específicas en este ciclo”, afirmó el director nacional de Junaeb, Jaime Tohá.
Sin embargo, el panorama nutricional del país en estudiantes, tiene a mejorar desde primero medio, donde se visualizó una baja de la obesidad.
Aquí, hubo una disminución de e 1,25 puntos porcentuales (pp) en los índices de obesidad y 0,15 pp de disminución en obesidad severa, en comparación con la medición de 2017.
“Es una excelente noticia, en comparación a la información previa que indicaba que la prevalencia de obesidad en este nivel escolar se había duplicado durante los 7 años anteriores (entre 2011 y 2017)”, se indicó desde la Junaeb.
En relación a las zonas del país, las comunas con alta vulnerabilidad están en la Región Metropolitana y las regiones del sur del país, las que presentan una mayor prevalencia de obesidad infantil.
Este estudio analizó cinco niveles educacionales en todo el país (prekínder, kínder, 1° básico, quinto básico y 1° medio) del sistema que recibe financiamiento público.
