El Gobierno anunció una querella en contra del organizador de una nueva fiesta clandestina que fue descubierta este sábado en la madrugada en la comuna de Santiago, en pleno toque de queda, donde fueron detenidas 29 personas, la mayoría de origen peruano.

“Nuevamente se trata de una conducta inaceptable, que no entiende la gravedad de la pandemia que vivimos. Vamos a presentar querella criminal para buscar una condena ejemplificadora”, informó el subsecretario del Interior, Juan Francisco Galli.

Asimismo, señaló que “en el caso de los extranjeros además investigaremos su situación migratoria para determinar si amerita su expulsión del país”. Los 29 detenidos pasarán a control por infracción al artículo 318 del Código Penal, es decir, por poner en peligro la salud pública.

De acuerdo a los antecedentes policiales, la fiesta se realizó en un galpón de calle Copiapó 667, dedicado al lavado y estacionamiento de vehículos, donde el organizador instaló equipos de música y también vendió bebidas alcohólicas y alimentos.

“Al llegar personal de Seguridad Municipal y de Carabineros, efectivamente había música de alto volumen, ingresan al lugar tomando contacto con el organizador y verificando que en el interior había unas 50 personas que estaban en una fiesta clandestina“, señaló el capitán Remsy Parra, de la Prefectura Central.

Añadió que al ver la presencia policial, las personas comenzaron a huir del lugar, pero se logró la detención de 29 de ellas, incluido el organizador, un sujeto de 41 años que tiene nacionalidad chilena, pero que sería de origen peruano. Al igual que en el caso de Maipú, difundió la fiesta por redes sociales.

En el lugar la policía logró el decomiso de bebidas alcohólicas, 144 botellas de cerveza, alimentos para consumo, dos equipos de amplificación, tickets de entrada y letreros con los precios. Todos quedaron a disposición de la Fiscalía Metropolitana Centro Norte y el organizador también fue imputado por infracción a la ley de alcoholes.

El 3 de mayo pasado, una fiesta clandestina con 400 personas en Maipú derivó en la detención del organizador, Juan Salazar Castañeda, a quien se le aplicó una multa de 50 millones de pesos. Salazar se encuentra con arresto domiciliario después de permanecer algunos días en prisión preventiva por violar la misma medida cautelar.