Los autores del estudio publicado en la revista científica Cell Reports afirman haber encontrado un mecanismo que, en ratones de laboratorio, bloquea específicamente la enzima HDAC2 en su acción degenerativa de la memoria sin causar daños colaterales.
“Esto es emocionante, porque por primera vez hemos encontrado un mecanismo específico por el cual la HDAC2 regula la expresión genética sináptica”, afirmó Li-Huei Tsai, directora del Instituto de Aprendizaje y Memoria Picower de MIT e investigadora senior del estudio.
Los científicos descubrieron que la enzima HDAC2 se liga con otra denominada Sp3 formando una unión que “condensa firmemente” los genes relacionados con la memoria, lo que impide su desarrollo.
Los investigadores utilizaron un fragmento relativamente grande de proteína que interfiere con la HDAC2 para evitar que se uniera a la Sp3 y por lo mismo se redujera su efecto debilitador de la memoria.
Ahora Hidekuni Yamakawa, Jemmie Cheng y Jay Penney, investigadores líderes del estudio, buscarán moléculas más pequeñas que cumplan esta misma función disociadora y que puedan ser administradas como medicamentos.
Hasta ahora, la mayoría de drogas inhibitorias de las enzimas HDAC, que presentan más de una docena de formas, también bloqueaban otras como la HDAC-1, lo que podía tener efectos tóxicos, pues esta enzima es necesaria “para la proliferación de las células especialmente en la producción de glóbulos blancos y rojos”.
Para llegar a la identificación de la función específica de la HDAC2, los investigadores analizaron tejidos de personas fallecidas que no sufrían de Alzheimer, de los cuales 28 tenían niveles altos de la enzima y 35 con niveles bajos.
El análisis condujo a la identificación de aproximadamente 2.000 genes con niveles similares a la HDAC2 de los cuales -basados en la información de sus funciones- los investigadores eligieron tres para exámenes posteriores.
El estudio de estos tres genes llevó a la identificación de la Sp3 como la enzima ligada a la HDAC2 para la supresión de las células de la memoria.
Posteriormente, la investigación encontró que desactivando la Sp3 en ratones utilizados como modelos de Alzheimer se restablecía la habilidad de la memoria a largo plazo.
Tsai anunció que espera continuar investigaciones sobre la HDAC2, que también aparece en niveles altos en otras enfermedades, como el caso de los pacientes con Trastorno por Estrés Postraumático (PTSD).