En 2014, el Tribunal Oral en lo Penal de Santiago lo declaró culpable de abusos sexuales reiterados con una menor de edad que estudiaba en el colegio Cumbres. Por esto cumplió con una sentencia de cuatro años de presidio con libertad vigilada.
José Ignacio Escobar, abogado de las víctimas, dijo a radio Cooperativa que “”su nacionalidad por gracia fue revocada con ocasión de esta condena, razón por la cual no hay ninguna justificación para que se mantenga en el país“.
Descartó, por ahora, que exista algún recurso de amparo para evitar la expulsión. Remarcó que “el decreto que lo conmina a abandonar el país es un decreto que ya fue revisado por la Corte Suprema, por lo tanto, respecto a esa decisión del administrativo está a firme y no se ve ninguna razón por la cual debería revisarse esa decisión y cambiarse el criterio”.