La Presidenta Michelle Bachelet encabezó este lunes un acto en memoria del expresidente Salvador Allende y sus colaboradores, en un nuevo aniversario del Golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973.
Tras una ceremonia interreligiosa, la Mandataria dio un discurso que comenzó haciendo referencia al asesinato del expresidente Eduardo Frei Montalva. “Este septiembre nos recibe además con una verdad a la que fuimos asomándonos de a poco y que hoy es una certeza. La dictadura perpetró de la manera más cobarde y avergonzante el asesinato, el magnicidio del expresidente Eduardo Frei Montalva, tal como ha establecido la justicia”.
Posteriormente, Bachelet anunció una serie de medidas para “saldar” deudas pendientes en materia de verdad, reparación y justicia. En ese marco señaló que dotará de discusión inmediata al proyecto que levanta el secreto sobre los antecedentes aportados a la Comisión Valech I, para que esa información se pueda entregar a los tribunales.
En materia de reparación, indicó que presentará un mecanismo de recalificación para víctimas de prisión política, tortura, desaparición forzada y ejecuciones políticas, para lo que habrá una comisión asesora que revisará los antecedentes de quienes hayan sido rechazados por la Comisión Valech II.
Finalmente anunció que firmará un convenio entre la unidad de DD.HH. de la Subsecretaría junto con la Corporación de Asistencia Judicial de la Región Metropolitana, para que jóvenes estudiantes de Derecho puedan asistir legalmente a familiares de víctimas apoyando su ingreso a la justicia.
Tras esos anuncios, Bachelet señaló que “el odio no puede ni debe conducir a Chile” y agregó que no permitirá “que se pretenda hacer ver el legítimo anhelo de justicia y reparación de miles de familias en Chile como revanchismo“.
La Mandataria también envió un mensaje que podría ser interpretado como una respuesta a los insultos que recibió este domingo en el Te Deum Evangélico, al decir que “no podemos permitir que las creencias personales, políticas, religiosas o valóricas nos hagan perder el respeto por los modos de convivencia cívica por el otro o los otros“.
Tras una ceremonia interreligiosa, la Mandataria dio un discurso que comenzó haciendo referencia al asesinato del expresidente Eduardo Frei Montalva. “Este septiembre nos recibe además con una verdad a la que fuimos asomándonos de a poco y que hoy es una certeza. La dictadura perpetró de la manera más cobarde y avergonzante el asesinato, el magnicidio del expresidente Eduardo Frei Montalva, tal como ha establecido la justicia”.
Posteriormente, Bachelet anunció una serie de medidas para “saldar” deudas pendientes en materia de verdad, reparación y justicia. En ese marco señaló que dotará de discusión inmediata al proyecto que levanta el secreto sobre los antecedentes aportados a la Comisión Valech I, para que esa información se pueda entregar a los tribunales.
En materia de reparación, indicó que presentará un mecanismo de recalificación para víctimas de prisión política, tortura, desaparición forzada y ejecuciones políticas, para lo que habrá una comisión asesora que revisará los antecedentes de quienes hayan sido rechazados por la Comisión Valech II.
Finalmente anunció que firmará un convenio entre la unidad de DD.HH. de la Subsecretaría junto con la Corporación de Asistencia Judicial de la Región Metropolitana, para que jóvenes estudiantes de Derecho puedan asistir legalmente a familiares de víctimas apoyando su ingreso a la justicia.
Tras esos anuncios, Bachelet señaló que “el odio no puede ni debe conducir a Chile” y agregó que no permitirá “que se pretenda hacer ver el legítimo anhelo de justicia y reparación de miles de familias en Chile como revanchismo“.
La Mandataria también envió un mensaje que podría ser interpretado como una respuesta a los insultos que recibió este domingo en el Te Deum Evangélico, al decir que “no podemos permitir que las creencias personales, políticas, religiosas o valóricas nos hagan perder el respeto por los modos de convivencia cívica por el otro o los otros“.