El presidente ruso Vladimir Putin postergó este martes de 2024 a 2030 la fecha límite de los ambiciosos objetivos sociales y económicos que se planteó para la reelección al Kremlin, incluida la reducción de la pobreza.
En 2018, tras obtener un nuevo mandato de seis años, Putin se puso objetivos incluidos la reducción de la pobreza a la mitad de la que había en 2017, incrementar las pensiones y aumentar la esperanza de vida a 78 años en 2024.
Las últimas metas publicadas este martes estipulan como nueva fecha límite 2030.
El vocero del Kremlin, Dmitri Peskov, dijo a los periodistas que las metas de aumentar la esperanza de vida y reducir la pobreza fueron postergadas debido a las “condiciones económicas mundiales desfavorables que ralentizarán el desarrollo de todos los países sin excepción”.
Las estadísticas oficiales de 2019 indican que más de 18 millones de rusos viven bajo la línea de pobreza, un 12,3% de la población. Esto implica tener mensualmente un ingreso menor a 10.890 rublos (120 mil pesos chilenos).
La esperanza de vida ha crecido en los últimos años desde niveles muy bajos en los años post-soviéticos, especialmente entre los hombres. En 2019, era de 67 años para los hombres y de 77 para las mujeres.
Cuando emitió un decreto con las metas originales, Putin no tenía derecho de extender su mandato más allá de 2024. Ahora, modificó la constitución para permitirse otros dos mandatos consecutivos hasta 2036.
En su último mandato, Putin introdujo algunas medidas impopulares para incrementar la edad de pensión para el Estado desde la era soviética y para aumentar el IVA, lo cual afectó su índice de aprobación.
Este año Rusia ha visto su economía, dependiente de la exportación de hidrocarburos, afectada por un colapso en los precios del petróleo y por la pandemia del coronavirus.
Peskov admitió que Rusia había perdido por completo el objetivo de convertirse en una de las cinco principales economías del mundo, algo que Putin incluyó en su decreto de 2018 sobre objetivos nacionales y tareas estratégicas.
“Las condiciones económicas internacionales son altamente desfavorables”, dijo Peskov. “Sin dudas, es necesario un cierto reajuste”, concluyó.