El cierre de la filial chilena, que operó por 26 años en suelo nacional, se suma a la desaparición de las filiales de Televisa en Argentina y Colombia.
Se informó que los abogados de la empresa están negociando con los trabajadores para llegar a un acuerdo sobre su indemnización. Preliminarmente, la editorial solo pagaría la mitad de la indemnización, pero si el funcionario no acepta tendrá que demandar a la compañía, lo que alargaría el plazo para cancelar.
El fin de la editorial, con 26 años de labores en el país, se debe a una decisión tomada por el grupo de cerrar sus oficinas de publicaciones en Latinoamérica, según consignó CNN.