El espectáculo se realizará en el cerro Renca, que es el límite de ambas comunas y contará con 25 toneladas de fuegos artificiales con un alcance de 1,5 millones de espectadores, por eso extendieron la invitación a todas las familias para que vayan a disfrutar de él la noche del 31 de diciembre.
“Estamos promoviendo el encuentro familiar porque somos unos convencidos que este tipo de actividades no pueden estar disponibles solo para quienes tienen recursos y pagan por ellas, sino que deben estar al alcance de todos. Es una forma de democratizar la alegría”, enfatizó el jefe comunal quilicurano.
A su turn, el edil de Renca dijo que “con Quilicura somos comunas hermanas, compartimos el territorio y el cerro más alto de la Región Metropolitana y, desde este año, unimos fuerzas para disfrutar juntos el Año Nuevo con esta fiesta pirotécnica. La más grande de la región”.