Esto después de que un informe reveló que la empresa automotriz francesa incumplió las normas anticontaminación, incluso algunos modelos superaban los niveles autorizados de CO2 y de óxido de nitrógeno, aunque no detectaron el empleo de programas fraudulentos.

El constructor automotriz Renault llamará a revisión 15.000 vehículos antes de su venta para ajustar sus motores, después de que saliera a la luz que incumplió las normas anticontaminación, anunció el martes la ministra francesa de Ecología, Segolene Royal.

Renault “se comprometió a llamar a revisión un determinado número de vehículos, 15.000, para verificarlos y ajustarlos para que el sistema de filtración funcione correctamente”, declaró la ministra a la radio francesa RTL.

Los “nuevos autos deben ser conformes a las normas”, recalcó la ministra.

La víspera, Renault mantuvo una reunión en el ministerio de Ecología con la comisión técnica que detectó un incumplimiento de las normas anticontaminación en sus motores diésel.

Royal había ordenado que se inspeccionaran vehículos de varias marcas después del escándalo del alemán Volskwagen, que equipó 11 millones de motores diésel con un programa capaz de alterar los resultados de los controles anticontaminación.

Los tests revelaron que algunos modelos, sobre todo de Renault, superaban los niveles autorizados de CO2 y de óxido de nitrógeno, pero no detectaron el empleo de programas fraudulentos.

Los otros constructores concernidos, “aceptaron declarar ante la comisión”, dijo Royal, sin querer citar por ahora su nombre.