El Seremi de Salud metropolitano, Carlos Aranda, dirigió un operativo en el centro de Santiago a dos restaurantes de comidas típicas en el marco de la campaña de fiscalización que desde el 13 de agosto efectúa la autoridad sanitaria para prevenir enfermedades de transmisión alimentaria (ETA) en las actividades de Fiestas Patrias.
En los locales se inspeccionaron las condiciones higiénicas, la calidad de los alimentos y las condiciones laborales de los establecimientos.
Más de 40 restaurantes ya han sido inspeccionados por los fiscalizadores de la Seremi de Salud RM durante la campaña 2017, encontrando deficiencias en 5 de ellos, por lo que se abrió un sumario sanitario en cada caso, cuyas multas pueden fluctuar entre las 0,1 y 1000 Unidades Tributarias Mensuales dependiendo de la sentencia del sumario.
Las principales faltas constatadas durante las fiscalizaciones de la campaña, se relacionan con el aseo, conservación deficiente de los platos preparados, sistema de extracción de calor insuficiente para la seguridad de los trabajadores, vapor, olores inapropiados y problemas con los servicios higiénicos del público y el personal.
Además, indicó que “el olfato es un sentido que nos alerta sobre la calidad del alimento; los olores deben ser tradicionales a la cocción o a especias naturales, no consuma alimentos con olores desagradables, extraños o putrefactos”.
El doctor Aranda sugirió a los comensales preferir cortes de carne bien cocidos, ya que en los puntos medios y crudos de cocción hay riesgo de contraer enfermedades alimentarias, ya que “todas las carnes potencialmente contienen bacterias que si no se destruyen a través de la correcta cocción pueden causar una intoxicación alimentaria, sobre todo las que tienen mayor manipulación como la carne molida o la carne picada”.
Para quienes prepararán carne a la parrilla en casa, Aranda recomendó evitar “romper la cadena de frío de las carnes. Trate de adquirirlas al final de sus compras, antes de volver a su hogar. La idea es que no pase más de entre 30 minutos a una hora desde que se compra, hasta que se refrigera a 5º Celsius”.
En los locales se inspeccionaron las condiciones higiénicas, la calidad de los alimentos y las condiciones laborales de los establecimientos.
Más de 40 restaurantes ya han sido inspeccionados por los fiscalizadores de la Seremi de Salud RM durante la campaña 2017, encontrando deficiencias en 5 de ellos, por lo que se abrió un sumario sanitario en cada caso, cuyas multas pueden fluctuar entre las 0,1 y 1000 Unidades Tributarias Mensuales dependiendo de la sentencia del sumario.
Las principales faltas constatadas durante las fiscalizaciones de la campaña, se relacionan con el aseo, conservación deficiente de los platos preparados, sistema de extracción de calor insuficiente para la seguridad de los trabajadores, vapor, olores inapropiados y problemas con los servicios higiénicos del público y el personal.
COMO SABER SI UN LOCAL CUMPLE LAS CONDICIONES
El seremi Aranda efectuó un llamado a los consumidores a “cuando usted entre a un local de parrilladas o de comida típica, debe fijar su atención en la limpieza del local, de los baños y de los cubiertos y vajilla; observar la higiene de las personas que atienden y su presentación personal. Estas medidas son una alerta sobre las prácticas higiénicas del restaurant en su propia cocina”.Además, indicó que “el olfato es un sentido que nos alerta sobre la calidad del alimento; los olores deben ser tradicionales a la cocción o a especias naturales, no consuma alimentos con olores desagradables, extraños o putrefactos”.
El doctor Aranda sugirió a los comensales preferir cortes de carne bien cocidos, ya que en los puntos medios y crudos de cocción hay riesgo de contraer enfermedades alimentarias, ya que “todas las carnes potencialmente contienen bacterias que si no se destruyen a través de la correcta cocción pueden causar una intoxicación alimentaria, sobre todo las que tienen mayor manipulación como la carne molida o la carne picada”.
Para quienes prepararán carne a la parrilla en casa, Aranda recomendó evitar “romper la cadena de frío de las carnes. Trate de adquirirlas al final de sus compras, antes de volver a su hogar. La idea es que no pase más de entre 30 minutos a una hora desde que se compra, hasta que se refrigera a 5º Celsius”.