Un destacado asesor científico del gobierno británico aseguró esperar el martes que a principios de 2021 se aprueben varias vacunas contra el coronavirus y la vida pueda comenzar a volver a la normalidad para las vacaciones de Semana Santa.
No debe “subestimarse” la importancia del anuncio hecho el lunes por el gigante farmacéutico estadounidense Pfizer de que su vacuna es eficaz, dijo ante una comisión parlamentaria John Bell, profesor de medicina de la Universidad de Oxford y miembro del Grupo de Asesoría Científica para Emergencias (SAGE).
“Hay muchos patógenos para los que buscamos una vacuna eficaz durante décadas y no la hemos encontrado”, afirmó, asegurando que, aunque “todo el mundo daba por sentado que alguien produciría una vacuna” del coronavirus eso “no era cierto” por lo que esto es “un enorme avance”.
Y hace pensar que otras potenciales vacunas basadas en principios similares pueden resultar igualmente efectivas, agregó.
“No me sorprendería que llegáramos al nuevo año con dos o tres vacunas que pudieran ser distribuidas”, afirmó.
Según Bell, hay un 70% u 80% de posibilidades de “que se logren suficientes vacunas en el primer trimestre del próximo año para que en la primavera (boreal) las cosas empiecen a parecer mucho más normales”.
A condición, precisó, que la distribución se haga correctamente.
Pfizer anunció que los ensayos de la vacuna que desarrolla con BioNTech, en los que participaron más de 40.000 personas, tuvieron una eficacia del 90%.
El suyo es uno de los 10 proyectos en fase avanzada en todo el mundo que están dando resultados prometedores.
El gobierno británico reservó 40 millones de dosis de la vacuna de Pfizer, que según Bell podría recibir aprobación de los reguladores en las próximas semanas.
“Estamos hablando de mediados de diciembre cuando creo que deberíamos estar listos para administrar esta vacuna”, afirmó.
El primer ministro británico, Boris Johnson, celebró la noticia el lunes, pero advirtió de que aún es “muy, muy pronto” y que la vacunación en el Reino Unido está “todavía lejos”.
El ministro de Sanidad, Matt Hancock, aseguró el martes que se pidió al Servicio Nacional de Salud británico que se prepare para empezar a distribuir la vacuna a principios de diciembre.
El gobierno planea dar prioridad a “las personas que viven en residencias de ancianos y a quienes los cuidan, al personal sanitario y asistentes sociales y luego ir bajando por franjas de edad”, precisó.