A doce días del sorpresivo anuncio, el Vaticano presentó este viernes a su nuevo equipo de comunicaciones que tendrá como miembro a un sudamericano.
Fue el propio director interino de la sala de prensa de la Santa Sede, el italiano Alessandro Gisotti, quien hizo el anuncio y presentó al periodista peruano, Raúl Cabrera Pérez, al que se suma su colega francesa, la periodista Romilda Ferrauto, y dos estadounidenses. Cabe recordar que sin explicación, el Vaticano anunció el 31 de diciembre pasado la dimisión de su portavoz, el estadounidense Greg Burke y de su adjunta, la española Paloma García Ovejero, dos periodistas.
En la oportunidad Gisotti precisó que había aceptado esta función de manera completamente inesperada pero de manera exclusivamente provisional.
“Se trata de una medida excepcional para responder a una situación excepcional”, comentó ante los periodistas presentes en la sala de prensa, sin comentar entonces la determinación de su predecesor.
El periodista italiano quiso en cambio rodearse de cuatro “periodistas” internacionales, para dirigir “una máquina delicada y compleja”, despejando la sospecha de que la información del Vaticano quedara bajo control italiano.
El dicasterio (ministerio) para la Comunicación, creado en 2015 por el papa Francisco para reagrupar bajo un mismo portal a todos los medios de comunicación de la Santa Sede, nombró el viernes al resto del equipo de la sala de prensa a título definitivo.
La franco-italiana Romilda Ferrauto, que dirigió durante mucho tiempo la sección francesa de Radio Vaticano antes de jubilarse recientemente, obtiene por su parte el papel clave de “consejera” del director de la sala de prensa. Precisó que no intervendría como portavoz del Vaticano.
La profesional de las comunicaciones, que tiene un impecable conocimiento del funcionamiento de la Santa Sede, trabajó en los equipos de comunicación de los cinco últimos sínodos (asambleas mundiales de obispos), incluido el dedicado a los jóvenes en octubre.
La oficina de prensa nombró a dos asistentes, el peruano Raúl Cabrera Pérez (periodista de la sección hispanohablante de Radio Vaticano) y la estadounidense hermana Bernadette Reis (asesora de comunicación de una universidad de Roma que colaboró igualmente en la sección anglosajona de Radio Vaticano). Un estadounidense, Thaddeus Jones, completa este equipo y se concentrará en las tareas de gestión práctica de la sala de prensa. Anteriormente se ocupaba especialmente del portal de informaciones del Vaticano.
La sede pontificia se da hasta 2020 para completar un vasta reestructuración dentro de la comunicación vaticana. En julio, el periodista italiano Paolo Ruffini fue designado a la cabeza del dicasterio para la Comunicación. Primer laico en ser prefecto de un dicasterio, Ruffini reemplazó al prelado italiano Dario Vigano, apartado en marzo tras una polémica relacionada con la difusión de una carta modificada del papa emérito Benedicto XVI.
El 18 de diciembre, la Santa Sede nombró al vaticanista italiano de la Stampa, Andrea Tornielli, cercano al papa, como director editorial del dicasterio.
Fue el propio director interino de la sala de prensa de la Santa Sede, el italiano Alessandro Gisotti, quien hizo el anuncio y presentó al periodista peruano, Raúl Cabrera Pérez, al que se suma su colega francesa, la periodista Romilda Ferrauto, y dos estadounidenses. Cabe recordar que sin explicación, el Vaticano anunció el 31 de diciembre pasado la dimisión de su portavoz, el estadounidense Greg Burke y de su adjunta, la española Paloma García Ovejero, dos periodistas.
En la oportunidad Gisotti precisó que había aceptado esta función de manera completamente inesperada pero de manera exclusivamente provisional.
“Se trata de una medida excepcional para responder a una situación excepcional”, comentó ante los periodistas presentes en la sala de prensa, sin comentar entonces la determinación de su predecesor.
El periodista italiano quiso en cambio rodearse de cuatro “periodistas” internacionales, para dirigir “una máquina delicada y compleja”, despejando la sospecha de que la información del Vaticano quedara bajo control italiano.
El dicasterio (ministerio) para la Comunicación, creado en 2015 por el papa Francisco para reagrupar bajo un mismo portal a todos los medios de comunicación de la Santa Sede, nombró el viernes al resto del equipo de la sala de prensa a título definitivo.
La franco-italiana Romilda Ferrauto, que dirigió durante mucho tiempo la sección francesa de Radio Vaticano antes de jubilarse recientemente, obtiene por su parte el papel clave de “consejera” del director de la sala de prensa. Precisó que no intervendría como portavoz del Vaticano.
La profesional de las comunicaciones, que tiene un impecable conocimiento del funcionamiento de la Santa Sede, trabajó en los equipos de comunicación de los cinco últimos sínodos (asambleas mundiales de obispos), incluido el dedicado a los jóvenes en octubre.
La oficina de prensa nombró a dos asistentes, el peruano Raúl Cabrera Pérez (periodista de la sección hispanohablante de Radio Vaticano) y la estadounidense hermana Bernadette Reis (asesora de comunicación de una universidad de Roma que colaboró igualmente en la sección anglosajona de Radio Vaticano). Un estadounidense, Thaddeus Jones, completa este equipo y se concentrará en las tareas de gestión práctica de la sala de prensa. Anteriormente se ocupaba especialmente del portal de informaciones del Vaticano.
La sede pontificia se da hasta 2020 para completar un vasta reestructuración dentro de la comunicación vaticana. En julio, el periodista italiano Paolo Ruffini fue designado a la cabeza del dicasterio para la Comunicación. Primer laico en ser prefecto de un dicasterio, Ruffini reemplazó al prelado italiano Dario Vigano, apartado en marzo tras una polémica relacionada con la difusión de una carta modificada del papa emérito Benedicto XVI.
El 18 de diciembre, la Santa Sede nombró al vaticanista italiano de la Stampa, Andrea Tornielli, cercano al papa, como director editorial del dicasterio.
