El sismo de mediana intensidad que se percibió la tarde del lunes en Santiago, volvió a encender las alarmas sobre el riesgo al que están expuestas miles de personas y construcciones emplazadas tanto en las cercanía como sobre la Falla de San Ramón, que cruza al menos a 9 comunas de la Región Metropolitana.

Para el presidente de la Comisión Falla San Ramón, diputado de Acción Humanista, Tomás Hirsch, cada vez queda más claro la importancia de la instancia y la necesidad de tener normativas claras.

 “Es fundamental que se prohíba cualquier tipo de construcción, sobre todo de vivienda e infraestructura crítica sobre la falla y, al menos 300 metros al oriente y poniente de la misma. El Sernageomin (Servicio Nacional de Geología y Minería de Chile) fue muy claro en mostrar los efectos que podría tener un sismo sobre las construcciones que se instalan sobre la falla. Ahora el Centro Sismológico Nacional nos hizo saber sobre el monitoreo que realizan en todo el sector, y que demuestran que está activa y que en algún momento puede generar un daño tremendo sobre la población que vive ahí”, indicó.

En la última sesión expuso el director del Centro Sismológico Nacional, Sergio Barrientos, quien explicó los riesgos de construcción en zonas de alto actividad sísmica.

Según detalló, “cualquier obra o edificio requiere de un estudio sobre el riesgo sísmico y tienen que regirse bajo la norma NCH-433, que indica cómo se debe construir en Chile. Esa norma tiene diferentes zonas que son más peligrosas que otras (…). Eso implica una cierta precaución, porque en esos lugares hay un cierto nivel de aceleración que puede ser excedida, por lo tanto, hay que construir de mejor manera; también tomar en cuenta el tipo de suelo, cuál es la composición del suelo, las velocidades de las ondas, eso da una estimación de la dureza del suelo, que es muy importante en la construcción. Estas normas van siendo actualizadas con cada terremoto importante y, cuando se adquiere esta nueva información, esto se va incorporando a la norma sísmica”.

Al referirse en concreto a la zona de la Falla de San Ramón, Barrientos comentó que “hay que revisar cuáles son los edificios o construcciones que están en las cercanías de la Falla de San Ramón y que fueron levantadas previo al conocimiento de ella; y ver si cumplen con estos nuevos criterios de seguridad”. Agregó que en el caso del reactor nuclear, ubicado en La Reina, “este debe ser revisado porque es una estructura que pretende durar mucho tiempo en el mismo lugar. Entonces, hay que considerar alguna solución para esa estructura”.

De esta forma, la conclusión del experto coincide con la entregada en sesiones previas ante la comisión, como la del director de la Onemi, Ricardo Toro, quien señaló que “nuestra posición es que no se debe construir en las zonas de riesgo, y si se va a construir, debe tener todas las obras de mitigación correspondientes para convivir con la falla. Por lo tanto, esa es nuestra posición: donde hay riesgo no se debe construir, y si se llega a hacer, debe estar demostrada y trabajada todas las obras de mitigación que permitirían reducir el riesgo”.

Además, el presidente de la Comisión sostuvo que, “al terminar la sesión del lunes, a los pocos segundos, tuvimos un sismo que se sintió muy fuerte en Valparaíso. La misma naturaleza se encargó de demostrarnos la necesidad de tener las medidas de protección y prevención para evitar un daño a la vida y propiedad de quienes están en la cercanía de la Falla”.

El parlamentario adelantó que como comisión a la próxima sesión invitarán a los alcaldes y alcaldesas de las comunas por las que se extiende la falla, como son San José de Maipo, La Florida, Puente Alto, Peñalolén, La Reina, Las Condes y Lo Barnechea, para contar con su visión y medidas de mitigación o de prevención que han realizado.