Un adulto mayor de 73 años ingresó armado la tarde de este viernes a la Municipalidad de Rancagua, exigiendo hablar con el alcalde, Eduardo Soto, para plantearle su complicada situación de salud.
A raíz de esta situación, se evacuó el edificio y llegó personal del GOPE y Labocar, quienes finalmente determinaron que las armas que portaba el sujeto eran falsas, porque portaba una pistola de aire comprimido.
“Tenía una pistola en su mano derecha, yo estaba atendiendo a otra persona, le di la bienvenida, le dije que tome asiento, de qué se trata, en qué podemos atenderlo, y me dijo que él confiaba que a través mío podía exponer su problema que tenía que ver principalmente por enfermedades que nunca habían sido atendidas“, contó el alcalde. El hombre fue detenido.
Claudio Aspe, defensor regional, informó que el adulto mayor quedó en libertad a la espera de una citación de la fiscalía, según informó El Rancagüino.
