El expresidente francés Nicolas Sarkozy fue condenado este jueves a un año de prisión, que podrá cumplir en arresto domiciliario, por la financiación ilegal de su campaña presidencial de 2012, lo cual es su segunda sentencia de cárcel en poco más de medio año.
El tribunal consideró que el expresidente francés entre 2007 y 2012 se benefició de un sistema de doble contabilidad puesto en marcha para poder superar los límites de gasto impuestos por la ley francesa.
A raíz de lo anterior, le impuso una pena superior a la que había solicitado la Fiscalía, que había pedido un año de cárcel con seis meses exentos de cumplimiento.
Este hecho se produce después de que en marzo pasado fuera condenado en primera instancia a tres años de cárcel, dos de ellos exentos de cumplimiento y el otro en arresto domiciliario, por corrupción y tráfico de influencias, sentencia que está pendiente de apelación.
Sarkozy no acudió a la lectura del veredicto, al que sí acudieron la mayor parte de los otros acusados, todos ellos condenados por estafa, desvío de fondos y financiación ilegal de campaña electoral.
