El curioso caso y nivel de fanatismo de una mamá de Nueva Zelanda no han pasado inadvertidos. La mujer, muy admiradora del metal, nombró a sus propios hijos: Metallica, Slayer y Pantera.
El anecdótico hecho fue dado a conocer por el director David Farrier, quien en un hilo de Twitter mostró los detalles que la mujer le entregó con respecto a la dura crianza. “No es fácil criar a tres de las bandas más pesadas”, le dijo. El nombre de la neozelandesa aún no se ha revelado.
Con respecto a esta situación, a Farrier le entró la curiosidad, y fue él mismo al registro civil del país de Oceanía para saber si existen algunas limitaciones en relación a la inscripción de nombres.
“No hay restricciones en ponerles nombres de bandas a los niños, siempre y cuando el nombre utilizado no sea generalmente considerado ofensivo y no se parezca a un título o rango oficial”, le informó el funcionario Jeff Montgomery.
Farrier remarcó que los hijos de esta mujer “merecen conciertos gratis de por vida”.