Los familiares del fotógrafo José Luis Abad, hombre que falleció en 2019 durante un ritual con el veneno de un sapo bufo en la localidad de Enguera, España, pidieron siete años de cárcel para el actor, director y productor de cine para adultos, Nacho Vidal, por su responsabilidad en la muerte del sujeto.
En concreto, se solicitan cuatro años de cárcel por homicidio imprudente y tres por un delito contra la salud pública.
Según consignó Agencia EFE, y en base al escrito de la acusación particular de la familia, también se pide la misma pena para una prima del actor, como cooperadora necesaria, y tres años para un amigo por encubrimiento.
Además, se exige a los tres acusados una indemnización de 150.000 euros, debido al daño psíquico y personal provocado.
Previamente, en el pasado mes de marzo, la Audiencia de Valencia había revocado el sobreseimiento provisional de la causa, al considerar que existen suficientes indicios para juzgar a Ignacio Jordà, nombre real de Vidal, y a los otros dos acusados.
En torno al rol de Vidal en la muerte del fotógrafo, y de acuerdo a lo informado por Emol, el tribunal cita como indicios que este último asumió la función de “director del rito”, atribuyéndose un “conocimiento especial sobre esta clase de ceremonias”.
Asimismo, se menciona que el actor dispuso la dosis que inhaló Abad en una pipeta de cristal, y que pese a estar al tanto de la toxicidad de la sustancia, no tomó “ninguna precaución ni antes ni durante su administración”.