El Presidente Sebastián Piñera promulgó durante la tarde de este jueves la Ley de Matrimonio Igualitario, luego de que fuera aprobada el pasado martes por el Congreso Nacional. Este histórico hecho tomó lugar cuatro años después de que la iniciativa fuera presentada, en agosto del 2017, por la exmandataria

“Hoy es un día de mucha emoción porque hay muchas y muchos que esperaron mucho tiempo para poder participar de un día como este, porque hoy vamos a promulgar la ley que permite el matrimonio igualitario”, partió diciendo el Mandatario.

“La verdadera libertad se construye siempre reconociéndonos como iguales en dignidad y en derechos, y sobre todo, iguales ante la ley. Y respetando y valorando la diversidad de identidades, de proyectos de vida, y por supuesto, esa libertad debe incluir la libertad de amar”, expresó.

Piñera aprovechó de destacar otros hitos legislativos similares realizados bajo su mandato: “En nuestro primer gobierno impulsamos el acuerdo de Unión civil, el cual permitió por primera vez en nuestra historia darle un reconocimiento legal a las relaciones de amor, de afecto, de parejas del mismo sexo. También promulgamos la ley Zamudio para terminar con esas odiosas discriminaciones arbitrarias, cuyo origen fue el caso de Karen Atala”.

“Al comienzo de este gobierno promulgamos la ley de identidad de género, que otorgó a toda persona el derecho a ser reconocida conforme a su género. Y siguiendo el camino que inició la presidenta Bachelet, a quien le agradezco hoy, y como lo dijimos en nuestra última cuenta pública, hoy llegó el tiempo del matrimonio igualitario en nuestro país”, complementó.

Así, celebró: “Con la ley de matrimonio igualitario que hoy promulgaremos, todas las parejas que así lo deseen, independiente de su orientación sexual, podrán vivir el amor, contraer matrimonio, y formar familia con toda la dignidad y protección legal que sin duda necesitan y merecen”.

El Jefe de Estado hizo hincapié en los tres principios en los cuales se basa esta histórica ley que permitirá que las parejas del mismo sexo puedan contraer matrimonio.

“Primero, proteger la familia y especialmente a los niños y niñas. Nuestro gobierno está comprometido con la protección de la familia y de poner a los niños primeros en la fila. La Ley de Matrimonio Igualitario permitirá que todos los niños con un papá y una mamá, con dos papás o con dos mamás, tengan los mismos derechos y la misma protección en materias tan importantes como el cuidado personal, la pensión de alimentos, y los derechos hereditarios”, explicó.

Luego, recalcó “el principio que todas las personas nacen libres e iguales en dignidad y en derecho, y por supuesto son iguales ante la ley. Y esta ley pone en un pie de igualdad a todas las relaciones de amor entre dos personas, porque es un deber del Estado el proteger todos los tipos de familia. Porque todas las familias necesitan y merecen ser protegidas, sin discriminar por la orientación sexual o identidad de género de quienes componen esa familia”.

“Tercero, resguardad y promover la libertad. La libertad es una condición esencial para que las personas puedan desarrollar sus talentos, y realizarse como personas, y puedan cumplir sus sueños y buscar la felicidad. Pero además, la libertad es una condición esencial para construir una sociedad más plena y sana”, consignó.

En ese sentido, hizo hincapié en “la libertad de vivir, de pensamiento y conciencia, de expresión, de emprender, y también de amar y construir nuestros propios proyectos de vida, que son reconocidos y protegidos por esta ley de matrimonio igualitario, la que también garantiza un Estado respetuoso de la vida privada de las personas”.

“Este es un día para celebrar, es un día histórico. Por eso iluminamos hace un par de días La Moneda con los colores de la diversidad, pero también es un día para reflexionar, porque a lo largo de la historia ha habido muchos grupos que han sido discriminados o perseguidos en función de su religión, sexo, color u orientación sexual”, resaltó Piñera.

De todas maneras, el gobernante manifestó que “esta ley no repara el sufrimiento que muchos han vivido, pero sí sabemos que significa un paso adelante hacia esa sociedad más libre, más tolerante con la diversidad, que al fin y al cabo es una sociedad más humana, más justa, más bondadosa. Esta ley nos permite también recordar y agradecer a tantas mujeres y hombres que han dedicado sus vidas a luchar contra la discriminación por su orientación o identidad sexual”.

“Queremos agradecer al Congreso que aprobó esta ley con apoyo de todos los partidos políticos, y muy especialmente a las organizaciones de la sociedad civil que han dado una larga lucha y que a pesar de todas las dificultades que han enfrentado en el camino, nunca doblegaron su espíritu, y siguieron luchando por esta causa, y porque esta y otras leyes puedan ver la luz del sol”, cerró.