De esta manera, se concretó el anuncio que hizo el Mandatario lunes pasado al comunicar que Chile entraba en fase 4 de la enfermedad, la más compleja, en que se produce circulación viral y dispersión comunitaria del Covid-19.
“Hemos decidido cerrar todas las fronteras terrestres, marítimas y áreas de nuestro país para el tránsito de personas extranjeras. Esto no afectará la entrada y salida de carga ni de los transportistas, para continuar garantizando un abastecimiento normal de nuestro país”, indicó el Jefe de Estado en esa oportunidad.
Los nacionales chilenos y los residentes permanentes en Chile que provengan de lugares de alto riesgo podrán ingresar al país sometiéndose a la aduana sanitaria y a una cuarentena obligatoria de 14 días.
“Respecto de la cuarentena, y queremos decirlo en forma fuerte y clara: nuestro Gobierno está ejerciendo y ejercerá todas las facultades que le otorga la ley para perseguir a aquellos que no cumplan con las instrucciones que ha entregado la autoridad sanitaria y ponen irresponsablemente en riesgo la salud de los demás. Esto significa aplicar las multas y penas de cárcel que establecen el Código Sanitario y el Código Penal”, advirtió el Presidente.
“Además, hemos solicitado a nuestras Fuerzas Armadas colaborar con el control de nuestras fronteras para asegurar que el cierre que hemos determinado sea íntegramente respetado”, añadió.