La actriz nacional, Mane Swett, se encuentra en EEUU desarrollando una “batalla judicial” con su expareja, John Bowe, luego de estar alejada por más de un año de su hijo, quien, de manera arbitraria, ha estado bajo el cuidado del hombre desde fines del 2022. 

El menor, de 11 años, viajó en dicha fecha a EEUU para estar con su padre, pero no regresó, por lo que Swett acusó a Bowe de incumplir las órdenes judiciales vigentes. En este sentido, la intérprete, representada por cinco abogados, se trasladó a inicios de abril a Nueva York para comenzar el proceso legal por la custodia del menor. 

Según consignó LUN, el juicio partió el pasado 8 de abril, y se solicitó la reserva de datos sensibles sobre el menor y la familia. Además, trascendió que ya han declarado personas chilenas que conocieron al niño.

Asimismo, el citado medio indicó que Swett, mediante sus abogados, presentó el pasado 23 de febrero una petición de regreso del menor, en conformidad con el Convenio de La Haya.

Por su parte, un juez determinó que el menor tenga su propio abogado independiente, que en este caso será la profesora Jennifer Baum, directora de una clínica de defensa infantil, y que ha desempeñado funciones similares en otros juicios.

La abogada Baum solicitó medidas de resguardo para proteger al niño cuando entregue su testimonio, que será tomado “a puertas cerradas” y “sellado”. 

En la misma línea, y de acuerdo a lo informado por LUN, Baum advirtió al juez que “permitir una inspección pública indiscriminada del testimonio no está justificado ni aconsejado, por la salud y seguridad del niño, quien no es parte de esta acción y que ya ha expresado, a través de su abogado, una ansiedad significativa y vergüenza por la posibilidad de una inspección pública de este caso”. 

“Este tribunal ya ha reconocido la necesidad de proteger al niño del escrutinio público durante su testimonio sobre los asuntos profundamente personales de familia y salud que son objeto de este litigio, al ordenar que su testimonio se oculte al público”, añadió.