El movimiento Weichán Auka Mapu dio a conocer su rechazo a la visita del Presidente Gabriel Boric este lunes a la Región del Biobío.
La agrupación, en la misma jornada, se adjudicó la quema de una bodega en la comuna de Vilcún, el ataque a una capilla en Contulmo y un corte de camino en la Ruta P-70.
El Mandatario llegó pasadas las 14:00 horas hasta la región, donde inauguró el SAR de Tirúa y realizará una premiación a deportistas panamericanos en San Pedro de la Paz.
A través de un comunicado, la agrupación planteó que “repudiamos rotundamente la visita del Presidente Gabriel Boric, representante del poder económico a la zona mapuche lavkenche, al gobierno y su nula visión política de un conflicto iniciado por el propio Estado para con nuestra gente”, consignó Cooperativa.
“Muestra de ello es la parafernalia que hoy como pony de batalla lleva adelante con su sórdido ‘Plan Buen Vivir’, plan que los municipios y alcaldías como ‘Arauco 7’ pongan la alfombra para que estos personajes lleguen a reírse de nuestras comunidades en nuestras zonas o a darles tribuna a través de sus mesas territoriales a personas que no pueden decidir por la voz de un territorio”, señalaron.
El movimiento solicitó “respeto a estas avanzadas del capital, a nuestros dirigentes emblemáticos a estar alertas y no dejarse sobar el lomo o enceguecerse por las luces y la fama, a no ser la punta de lanza de personas que han llegado al territorio a nublar la lucha y sacar réditos propios”.
“Manifestamos nuestro total apoyo a los lov y comunidades en resistencia en distintos puntos del wallmapu, que a causa de la lucha de un pueblo han tenido que sufrir los embates del poder económico a través de sus fieles rastreros las policías y militares lacayos del capital”, remarcaon.
El Presidente Boric aseguró que “acá no podemos permitir que se cometan delitos. Anoche en Contulmo dos personas quemaron una iglesia, eso es inaceptable, no hay causa que justifique la quema de una iglesia o un colegio, una escuela rural como se hizo hace poco, y la gente que hace eso tiene que ser puesta a disposición de la justicia y enfrentar el Estado de derecho”.
“En eso yo quiero ser muy claro y lo digo acá desde Tirúa, a quienes cometan ese tipo de actos van a tener que enfrentar la ley como corresponde”, agregó.
El Presidente insistió en que “tengo claro que esta situación es compleja y requiere de una voluntad política de largo aliento y de sobreponerse a quienes van a tratar de boicotearla, de diferentes lados (…) los tipos que quemaron la iglesia son uno, hay otros que no quieren ningún tipo de diálogo con el pueblo mapuche”.