La Fiscalía de Tarapacá y la PDI detuvo a una banda criminal integrada por 22 personas, entre ellos siete carabineros activos y cuatro ex uniformados, quienes hacían “quitadas” de cigarrillos a camiones que traían mercadería ilegal desde el extranjero.

La organización, que cometía los ilícitos en Huara, Alto Hospicio e Iquique, también cobraba entre $20 mil y $1 millón por dejar entrar la carga ilegal al país.

El fiscal Eduardo Ríos, de la Fiscalía Regional de Tarapacá, confirmó el jueves que, tras una investigación de más de dos años, un operativo de la PDI que incluyó allanamientos en distintas zonas del país terminó con la detención de 22 personas.

“Esta era una organización ilícita que operaba en la región de Tarapacá, que se dedicaba a distintos ilícitos, e involucra a 22 personas. La PDI ha ingresado a más de 20 domicilios en distintas partes del país y hay involucrados ex funcionarios de Carabineros, cuatro que fueron dados de baja, y siete funcionarios actuales de Carabineros, quienes actuaban junto a civiles en esta organización”, señaló el fiscal Ríos.

“Los ilícitos cometidos son robos con intimidación denominados ‘mexicanas’, que tienen que ver con sustraer especies, específicamente, cigarrillos, a ciudadanos extranjeros que los ingresaban ilegalmente al país”, añadió.

Según Ríos, estas “quitadas” de cigarrillos “se distribuían en Alto Hospicio e Iquique, pero también, en una segunda rama de la organización, había aceptación de dinero de civiles para que estos camiones (con carga ilegal) igualmente pasaran y continuaran su tránsito a Iquique y Alto Hospicio. Los montos (que cobraba la banda) iban de $20 mil a 1 millón de pesos”.

El fiscal a cargo de la investigación señaló que el personal activo de Carabineros involucrado trabaja “en el interior de la región, en Huara. Hay cabos, cabo primero y cabo segundo”.