Para la investigación se tomó en cuenta a un grupo de 6,3 millones de adultos, en los cuales se descubrió que el fármaco no solo incrementaba el riesgo de infarto, sino también de sangrado gastrointestinal en comparación con otros analgésicos.
El diclofenaco es un fármaco no esteroideo de uso muy frecuente y que es utilizado principalmente como antiinflamatorio, para tratar fiebre o dolor de muelas e incluso para aliviar cólicos menstruales.
“Es tiempo de reconocer el riesgo potencial para la salud del diclofenaco y reducir su uso”, señalaron los científicos a cargo de la investigación.
Agregaron que el medicamento no debería estar libre de venta “y cuando se prescribe debe estar acompañado por una advertencia en el frente de su caja advirtiendo sobre sus riesgos potenciales”.