Su familia notó la ausencia cuando, a eso de las 21:00 horas, el malogrado niño no regresaba, situación que motivó de inmediato la búsqueda que terminó con el terrible hallazgo en las orillas del río Tinguririca.
Los primeros antecedentes indican que el pequeño habría sido asesinado, ya que presentaba múltiples lesiones inferidas con arma blanca atribuibles a terceras personas, indicó radio Biobío.
En este contexto, el fiscal jefe de Santa Cruz, Gabriel Meza, instruyó a la Brigada de Homicidios de la PDI para que indague las circunstancias del fallecimiento. Personal de la policía civil trabaja en el lugar del hallazgo.