El Papa expresó su “dolor” ante el fallecimiento de 14 personas en un trágico accidente ocurrido el pasado domingo cuando la cabina de un teleférico se precipitó al vacío en un parque natural del norte de Italia.

“El Santo Padre Francisco recibió con gran dolor la noticia del dramático incidente producido en el funicular Stresa-Mottarone y desea expresar a los familiares de las víctimas su cercanía y sentido pesar”, se lee en un telegrama enviado como es habitual en nombre del Papa por el secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Pietro Parolin, al obispo de Novara, Giulio Brambilla.

El teleférico que conectaba la localidad piamontesa de Stresa, junto al Lago Maggiore, con la montaña de Mottarone, en el comienzo de los Alpes italianos, falló por causas desconocidas. El cable que sujetaba el vagón se cortó y el sistema de frenado de seguridad no funcionó.

En el accidente fallecieron 14 personas. Un niño de 5 años, Eitan, es el único superviviente, aunque se encuentra ingresado en estado muy grave en el hospital. “Pensando con conmoción en tantas vidas trágicamente rotas mientras estaban inmersas en las maravillas de la creación, asegura su oración por cuantos han perdido la vida, por quienes los lloran y por el pequeño Eitan, cuya delicada situación sigue con preocupación”, se lee en el telegrama.

Por último, se indica que el Papa “participa de modo particular en la aflicción de la comunidad local y de la Diócesis de Novara, y se une al querido pueblo italiano conmocionado por la grave tragedia. Al mismo tiempo, “implora al Señor el consuelo para quienes sufren, imparte de corazón a quienes están doloridos su bendición apostólica”.