Con la llegada del calor comienza la anhelada temporada de piscinas, especialmente para los niños. Sin embargo, es necesaria la prevención de los accidentes por inmersión en el agua, pues representan una de las principales causas de muertes en menores o dejan secuelas neurológicas de por vida.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la edad es un factor clave y de riesgo de ahogamiento. Es así como los índices más elevados de muerte por esta causa, van entre uno y cuatro años y le siguen los niños de 5 a 9 años.
Fernando Valenzuela, pediatra de la Clínica Biobío, asegura que “al contrario de lo que sucede con las personas adultas, en el caso de los niños, el 86% de los ahogamientos se producen en piscinas domésticas”.
Es por ello que el especialista entrega los siguientes consejos para evitar este tipo de accidentes:
- No perderlos de vista ni un segundo:
- Recordar la máxima 10/20:
- Cero distracciones:
- Protege tu piscina:
- Enséñales a nadar:
- Cuidado con la falsa sensación de seguridad:
- No dejar objetos en la piscina:
- No solo el agua es peligrosa: